El gobierno de Santiago ha cargado este jueves contra "la pataleta" de la Xunta, que ha anunciado que dejará en suspenso el tramo de la senda que afectaba al Bosque de Conxo y que destinará los fondos a otra actuación de movilidad "sostenible" en otro municipio, al tiempo que ha urgido explicaciones al portavoz local del PP, Borja Verea.

En una rueda de prensa para presentar el 30 aniversario de la Asociación do Traxe, la portavoz del gobierno municipal y concejala de Capital Cultural, Miriam Louzao, ha aludido al informe desfavorable que trascendió en la pasada jornada y que suscribió la anterior secretaria xeral de Patrimonio Cultural Carmen Martínez Insua el mismo día en el que se aprobó su cese.

"Rechaza el trazado alternativo y deja claro que la primera alternativa afectaba aún más, que es una cuestión bastante relevante. Un organismo de la propia Xunta confirma el daño patrimonial y natural a la zona, tal y como venían defendiendo el Ayuntamiento, que, como sabéis hizo alegaciones, y los vecinos", ha indicado.

"La Xunta decidió en su momento dedicar 13 millones de fondos europeos a un capricho de Borja Verea", ha censurado, antes de afirmar que, ahora, "queda claro que la senda no fue bien planificada y ahora hay riesgo de perder esos fondos europeos".

Sobre las manifestaciones de la Consellería que se ocupa de asuntos de movilidad sobre destinar los fondos a otro municipio, ha esgrimido que "suena claramente a una pataleta". "Estamos esperando a escuchar las palabras de Borja Verea", ha remarcado, antes de enfatizar que el líder local del PP "presumió de ser el conseguidor de este proyecto".

"Pues ahora estamos ansiosas por saber qué explicaciones da ahora a toda esta situación, ha apostillado, antes de subrayar que debería explicar "si le parece bien que esos fondos ahora se lleven a otro municipio" cuando el escenario deriva, ha insistido, "de una planificación equivocada desde el principio".

Y en cuanto a las dudas planteadas por los vecinos que se han movilizado contra la senda sobre si sería legal destinar fondos europeos que estaban proyectados para esta actuación a una distinta en otro municipio, ha replicado que comparte que "hay una duda". En todo caso, ha insistido en que la lectura apunta "a pataleta, a una cierta revancha", que ha reprobado.

A FAVOR DE LA MOVILIDAD SOSTENIBLE, PERO "NO A CUALQUIER COSTE"

Sobre este asunto también ha sido preguntado el concejal de Urbanismo en Raxoi, Iago Lestegás, al inicio de la segunda reunión de la mesa sectorial de vivienda, y ha recordado que el gobierno municipal dijo "desde el principio" que este proyecto "no era compatible con preservar" valores patrimoniales y naturales de la zona afectada.

Además, ha defendido que el gobierno que dirige Goretti Sanmartín está "a favor" de las infraestructuras de movilidad sostenible, pero "no a cualquier coste". El de esta actuación, ha agregado, era "excesivo". "Es una infraestructura mal planificada. Eso tiene consecuencias y la Xunta tendrá que dar explicaciones", ha zanjado.

Las reacciones tras el anuncio de la Xunta de que dejará en suspenso el tramo de la senda peatonal y ciclista que afectaba al Bosque del Banquete de Conxo se han sucedido este jueves y también se ha manifestado el líder del PP local, Borja Verea, quien ha afirmado que, si gobierna tras las próximas municipales de 2027, retomará el proyecto "en su integridad" e incluso lo "ampliará".

"Queda claro que Santiago es una ciudad en marcha con un tripartito que la frena", ha trasladado Verea, a través de un comunicado en el que esgrime que la senda peatonal y ciclista situaba a Santiago "a la altura de las ciudades europeas referentes en movilidad sostenible, un gran itinerario verde de conectividad colectiva".

Pero ha lamentado que, "desde el primer minuto", Compostela Aberta, PSOE y BNG "boicotearon este proyecto". "Los cegó tanto la ideología que no les importa perder una senda verde alternativa", ha afeado.

Dicho esto, ha proclamado que, si en 2027 se convierte en alcalde de la capital gallega, retomará el proyecto "en su integridad" e incluso "ampliará esta senda verda alternativa y de futuro" porque Compostela "merece volver a ser referente".

En este sentido, se ha mostrado convencido de que "la mayoría" de compostelanos "están cansados" y "aburridos" de "políticos tristes, acomplejados, antiguos".

"Yo soy claro, soy transparente, y creo que siempre lo intenté ser. Como alcalde, en 2027, concluiremos esta senda verde como alternativa de futuro y, además, la ampliaremos, siempre cumpliendo todos los requisitos patrimoniales, de patrimonio natural y cultural. Lo que no vamos a hacer son parches", ha sentenciado.

PREMISA "IRRENUNCIABLE"

"Hay una premisa que para mí es irrenunciable: que este sea un gran itinerario verde y de transformación de la ciudad. Como alcalde, avanzaré en la posibilidad de solucionar todas estas cuestiones para que el proyecto sea compatible con el patrimonio cultural, plenamente compatible con el patrimonio natural, y mejore sustancialmente la vida de los ciudadanos de Santiago", ha agregado.

No en vano, a su juicio, si Santiago quiere ser "referente en movilidad alternativa" no puede quedarse "en carriles bici parche", y considera que hay una serie de criterios que ve "irrenunciables", empezando porque "tiene que tener continuidad y separación absoluta de las carreteras y de los vehículos".

"Y tiene, además, que mejorar la vida de las personas con movilidad reducida, permitiéndoles llegar a donde hoy no llegan", ha añadido, para concluir que esta infraestructura, "cumpliendo estos requisitos", se finalizará "a partir de 2027", si él gobierna.

"Porque ese es el futuro, por donde va Europa y por donde va el mundo. No podemos seguir quedándonos atrás por culpa de un gobierno local triste acomplejado y antiguo", ha zanjado.

INFORME DESFAVORABLE

El gobierno local había demandado explicaciones a Verea después de que la Xunta anunciase que dejaba en suspenso el tramo de la senda que afecta al Bosque de Conxo y que destinaría los fondos a otra actuación de movilidad sostenible en un municipio distinto.

Todo ello, después de trascender que Carmen Martínez Insua, exdirectora xeral de Patrimonio Cultural, había suscrito un informe desfavorable al modificado del proyecto el mismo día en el que el Ejecutivo que dirige Alfonso Rueda autorizó su cese.

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