AGRICULTURA

UPA-UCE exige que la Junta rectifique la orden de incendios para flexibilizar las restricciones durante la cosecha de cereal

Este año en Extremadura se estiman unas 700.000 toneladas de cereales y la pasada campaña se recogieron en torno a 146.000 toneladas.

Redacción

Extremadura |

Estado de los pastos del incendio que el viernes se declaró en una zona cercana a la partida El Galindo, en Cáceres | EFE

Representantes de UPA-UCE Extremadura se han reunido este miércoles con el consejero de Mundo Rural, Ignacio Higuero, para reclamarle una rectificación de la nueva orden que establece la época de peligro alto de incendios y las restricciones que ha establecido para la actividad agraria sin que se haya producido una modificación de la normativa a nivel nacional.

UPA-UCE señala que se está en "plena cosecha" de cereales, en una campaña que, en principio, se puede calificar de positiva en cuanto a producción pero no en precios, sobre todo si se compara con la pasada que fue "catastrófica debido a la sequía".

Este año en Extremadura se estiman unas 700.000 toneladas de cereales y la pasada campaña se recogieron en torno a 146.000 toneladas, ha destacado la organización agraria en nota de prensa.

En concreto, UPA-UCE Extremadura ha pedido una modificación de los requisitos que la orden establece para la actividad de las cosechadoras, empacadoras y segadoras en Extremadura, ya que están generando problemas y retrasos a los agricultores a la hora de recoger la cosecha.

"Pedimos recoger la cosecha en unas condiciones de igualdad con el resto de agricultores cerealistas, no ya de países terceros ni europeos, sino españoles", ha señalado el secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas.

Así, Huertas ha criticado que dicha orden, que no se ha negociado con las OPAS, recoge unas restricciones horarias de 13,00 a 21,00 horas en las épocas de peligro muy alto y extremo. "Es una auténtica barbaridad que durante ocho horas al día no se pueda cosechar. Esto provoca retrasos importantes en la cosecha, aumenta los costes de producción y pone en riesgo el trabajo y el esfuerzo de los cerealistas a lo largo de todo el año", ha apuntado.