Luz verde a la nueva central de bombeo hidroeléctrico reversible proyectada por Iberdrola en Alcántara
Así, el proyecto cuenta con la DIA favorable y con el permiso de acceso a la red, y se encuentra a la espera de la próxima emisión de la autorización administrativa previa.
El proyecto para la construcción de la nueva central de bombeo hidroeléctrico reversible Alcántara II, ubicada en el término cacereño de Alcántara, ha logrado la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable, según resolución del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
De esta forma, el proyecto cuenta con la DIA favorable y con el permiso de acceso a la red, y se encuentra a la espera de la próxima emisión de la autorización administrativa previa.
Esta central de bombeo reversible contará con una potencia instalada de 440 MW, permitiendo un almacenamiento energético reversible de 16 millones de kWh equivalente al consumo medio diario de más de 4 millones de personas y proporciona una firmeza al sistema eléctrico de hasta 37 horas con las máquinas a plena carga.
Mediante esta central se podrá generar anualmente más de 1.000 GWh adicionales haciendo uso del mismo recurso hídrico que hasta la fecha, evitando con ello la emisión de un valor estimado de 355.000 toneladas de CO2 al año y contribuyendo de esta manera a la descarbonización del sistema eléctrico mediante una mayor integración de energías renovables no gestionables, solar y eólica, dotando al sistema eléctrico de mayor capacidad de adaptación y respuesta.
En cuanto a su diseño, la central utilizará los embalses creados por las presas existentes, teniendo en cuenta los importantes condicionantes ambientales y patrimoniales del entorno, de manera que la totalidad de los circuitos hidráulicos han sido diseñados subterráneos, incluyendo la central que ha sido proyectada en pozo.
La nueva central conectará el embalse inferior de Cedillo y el embalse superior de Alcántara mediante un doble circuito hidráulico subterráneo de 0,9 km de longitud y se aprovechará el desnivel existente entre los embalses de hasta 108 m a través de 2 turbinas reversibles de 220 MW de potencia.
Esta central "reversible" supondrá una mejora en la gestión y aprovechamiento del sistema hidroeléctrico ya existente en el río Tajo, generando un impacto nulo en los restantes usuarios del río Tajo, ya que además de hacer un uso "no consuntivo" del recurso hídrico de ambos embalses, como ya sucede en todas las centrales hidroeléctricas, reutilizará la misma agua en su funcionamiento.