Expertos en Inteligencia Artificial (IA) Generativa participan en una jornada formativa e informativa que ha tenido lugar en el CircularFab de Cáceres, dirigida a empresas y ciudadanía en general, para abordar el uso de esta tecnología como instrumento con el que avanzar, una vez que la Unión Europea acaba de aprobar la ley que regula el uso de la IA.
"Tenemos que tener claro que, al final, no nos quita el trabajo sino que nos quita trabajo, nos ayudará a acelerar y a ser mejores", ha señalado la experta en IA María Soto, de Plain Concepts, que coincide con la exposición de Vidal Martínez, de Telefónica Tech, que son los dos ponentes de la jornada sobre Inteligencia Artificial Generativa.
Por su parte, el diputado de Informática, Innovación y BOP, Tomás Sánchez Campo, ha señalado que la Inteligencia Artificial Generativa "ha surgido como un campo fascinante que redefine nuestra interacción con la tecnología", al tiempo que ha destacado el interés que ha despertado este encuentro, "ya que la tecnología avanza y se ha de ir incorporando al día a día si se quiere crecer".
En este sentido, con estos encuentros, la Diputación de Cáceres busca ir aproximando cada vez más la Inteligencia Artificial Generativa a los ciudadanos e ir apartando los temores que han podido ir surgiendo.
Precisamente, según ha recordado Vidal Martínez, el viernes salió de la Comisión Europea el nuevo reglamento que trata de regular el crecimiento de la IAG, para que todos los trabajadores, sobre todo los que trabajan en la creación, "no se sientan amenazados por esta nueva herramienta, y hacerles ver que no es negativo, que se puede trabajar conjuntamente con la IA".
"Veremos -ha añadido- que a nivel empresarial va a generar un cambio de ritmo, y habrá empresas que se adapten rápidamente, y habrá que hacerlo bien, no adaptarlo de forma errónea porque te puede llevar a un callejón sin salida".
La experta María Soto ha sostenido que este es un instrumento que, al final, interesa a todo el mundo, al ciudadano para su día a día, a personas que trabajan en su propio negocio o las que trabajen para terceros, una ayuda ya sea para generar texto, contenido, para generar imágenes o códigos, incluso, para programadores.
"Por no hablar de ayuda que puede suponer en el ámbito científico y médico, ya que se pueden analizar grandes cantidades de datos y encontrar patrones y relaciones que de otra manera no se detectarían", ha concluido.