BOMBEROS

El Servicio Municipal de Bomberos de Badajoz incorpora una autobomba urbana pesada con una inversión de 400.000 euros

Una bomba urbana pesada que, como ha indicado, es un vehículo "eminentemente urbano" para atender a incendios "de cierto nivel y de cierta consideración" y que viene a unirse a esta flota ya renovada con una inversión de 400.000 euros, aunque "no va a ser la última".

Europa Press

Badajoz |

El Servicio Municipal de Bomberos de Badajoz incorpora una autobomba urbana pesada con una inversión de 400.000 euros | Europa Press

El Ayuntamiento de Badajoz ha presentado este jueves el nuevo vehículo del Servicio Municipal de Bomberos, una nueva autobomba urbana pesada, con una inversión de 400.000 euros y que cuenta con los equipos de protección respiratoria o una bomba de alta-baja presión que también tiene un sistema automático de generación de espuma, que es un dispositivo con el que no contaban en el servicio.

Acompañado del concejal delegado Carlos Urueña, y del jefe de servicio de Bomberos de Badajoz, Basilio González, el alcalde de la ciudad, Ignacio Gragera, ha detallado que se trata de la presentación de un nuevo vehículo y que "van ya unos cuantos en los últimos años", ya que "afortunadamente" han tenido la oportunidad de ir renovando la flota de los mismos del Servicio Municipal de Bomberos.

Una bomba urbana pesada que, como ha indicado, es un vehículo "eminentemente urbano" para atender a incendios "de cierto nivel y de cierta consideración" y que viene a unirse a esta flota ya renovada con una inversión de 400.000 euros, aunque "no va a ser la última".

Así y una vez que ya tienen este vehículo, faltan dos más que están "por venir" y ya están contratados, entre una bomba forestal pesada también, que llegará "más o menos" a mediados del año 2025; y para finales del mismo una nueva autoescala de 42 metros que va a permitir hacer una renovación "casi completa" de la flota de bomberos en los últimos años.

De este modo, Gragera ha mostrado el compromiso del ayuntamiento con el Servicio de Bomberos y con la renovación de esta flota, y ha detallado que esta autobomba urbana pesada suple a una anterior "con ciertos años de antigüedad" y, por tanto, no va a ampliar el número de vehículos disponibles del servicio, pero sí lo dota de una mayor eficacia y rapidez y "sobre todo" para los bomberos de mejores medios materiales, "también de confort", para que puedan atender esos avisos o llamadas "en las mejores condiciones posibles".

Basilio González Lara, oficial jefe de Bomberos del ayuntamiento, ha detallado que se trata de bomba urbana pesada sobre un chasis de 16 toneladas, de doble cabina para cinco ocupantes y que trae los equipos de protección respiratoria o una bomba de alta-baja presión que también tiene un sistema automático de generación de espuma, que es un dispositivo con el que no contaban en el servicio. También incorpora equipamiento "eminentemente" para extinción y alguna herramienta por si, en un momento determinado, se necesita hacer algún tipo de rescate que exija excarcelación.

Por otro lado, el alcalde ha sido preguntado por su valoración después de que Facua, la Plataforma de los núcleos urbanos secundarios y la Federación de Asociaciones Vecinales Badajoz y poblados siglo XXI, han ofrecido este jueves una rueda de prensa en la que han trasladado la necesidad de que se produzca un consenso respecto a la ordenanza de la nueva tasa de basura entre los grupos municipales, al ser un asunto de "mucha trascendencia" para los próximos años en la ciudad.

Así, piden al alcalde que "abra una mesa" donde se establezcan criterios "objetivos" a la hora de la aplicación de las tasas, tanto de la parte fija como de la variable, y en la que deben de estar los grupos políticos con representación en el ayuntamiento y ponerse de acuerdo, ya que los criterios que se han establecido por parte del equipo de gobierno del Partido Popular no son "objetivos" ni recogen el principio que inspira la directiva europea y por transposición la ley española, por el que debe aplicarse el pago por generación o que quien más contamine más pague.

Según estos colectivos, Gragera también debe cumplir su palabra cuando dijo en el pleno municipal que se iba a estudiar una reducción en el IBI, presentarán alegaciones y van a solicitar intervenir en sesión plenaria para insistir en la necesidad del consenso y que se establezcan criterios "más objetivos" en la nueva ordenanza.

Sobre una posible rebaja del IBI, Ignacio Gragera ha apuntado que se sigue estudiando, pero que "esto no es de un día para otro", como también seguirán viendo cómo afecta o cómo se comporta esta nueva tasa de basuras respecto a la economía municipal, a la vez que ha incidido en que no se trata de una cuestión que haya aprobado el Ayuntamiento de Badajoz de manera voluntaria, "esto es una imposición".

"Como cualquier imposición y como cualquier normativa que se impone a los ayuntamientos, sin que los ayuntamientos puedan tomar parte en el proceso de elaboración o incluso de decisión, pues provoca algunos problemas y algunas disfuncionalidades. Como, por ejemplo, el hecho de que no se han dado unas directrices claras sobre cómo cobrar el impuesto o sobre cómo realizar los cálculos", ha continuado, junto con que en otras ciudades "se ha hecho de otra manera" pero los servicios se prestan de otra forma en la capital pacense, "y en el Ayuntamiento de Badajoz esta era la única posible".

"Y no lo decimos nosotros, sino que lo dicen los propios técnicos municipales, que han sido quienes han propuesto la solución técnica a este embolado en el que nos ha metido el Gobierno de Pedro Sánchez", ha remarcado Gragera, para quien a los consumidores los defienden desde el consistorio "poniendo esta tasa el último día que marcaba el plazo". Así, ha explicado que podrían haberlo hecho hace tres años y haber cobrado más de 25 millones de euros a los pacenses "de haberlo hecho cuando el Gobierno lo impuso", pero que este último dio una moratoria de tres años.

Al respecto, ha puesto el acento en que "el último día" es cuando los vecinos de Badajoz, entre los que se incluye, van a tener que pagar "una tasa impuesta por un Gobierno que no ha negociado y que no ha dado instrucciones claras, para que todos y cada uno de los ayuntamientos de este país y de esta región puedan tomar una decisión que sea lo menos gravosa posible para sus vecinos".