Arizmendi entre risas: "Siempre que toca el partido en el Bernabéu me llamáis. Espero que gane un día y me llaméis también".
El ex valencianista fue el autor del último gol que le dio la última victoria al Valencia en el Bernabéu
Valencia | 09.11.2023 16:04
Javier Arizmendi ha sido protagonista en Onda Deportiva Valencia. Suyo fue el último gol de Valencia en la última victoria en el Bernabéu. Fue un 23 de marzo de 2008 mientras el equipo de Koeman sufría intentando eludir el descenso. Afirmaba el ex futbolista, hoy alejado del mundo del fútbol que "siempre que toca el partido en el Bernabéu me llamáis. Espero que gane un día y me llaméis también aunque no haya sido el último que haya marcado el gol de la victoria".
Reconoce Arizmendi que para él "fue el momento soñado. Hacer un gol a pocos minutos del final y que dé la victoria a tu equipo en el Bernabéu cuando el equipo estaba coqueteando con las posiciones de abajo es el momento soñado por todo jugador".
Aquella temporada 2008 fue muy difícil. Tal vez similar a la que se vivió el pasado año en el Valencia. Aunque el ex valencianista matiza la diferencia "Aquel equipo se vio en una situación muy similar. La única diferencia quizás es que el vestuario de aquel entonces contaba con jugadores que eran referencia, que quizás ahora no están. Esa tranquilidad, los jugadores más jóvenes sí que la teníamos. Yo miraba a un lado y veía a Silva, a otro a Villa, a Marchena, a Albelda y decías esto lo sacamos adelante. El año pasado también se sacó y creo que el trabajo que se está haciendo está siendo buenísimo. Al final lo que te hace crecer y madurar son las dificultades. Cuando todo es una balsa de aceite quizás no se ve la verdadera realidad del fútbol, que es pasar por momentos difíciles, complicados y saber superarlos".
La figura de Baraja
En aquel vestuario coincidió con el hoy en día entrenador del Valencia. Arizmendi ya le veía maneras de entrenador. "Es una de las cosas más claras que yo he podido experimentar en el mundo del fútbol. El que hay ciertos compañeros que tú ves que van a acabar siendo entrenadores porque respiran fútbol, porque les encanta, porque están atentos a cada detalle. El caso de Rubén era uno de los más claros que yo he podido vivir".
El partido en el Bernabéu
Arizmendi aseguraba que este Valencia plagado de jugadores jóvenes tiene que ir al Bernabéu sin miedo, sin presión. "El Valencia está en una posición bastante desahogada, no es un partido a vida o muerte y yo creo que tiene que afrontar este partido intentando disfrutar. Y todo lo que sea sumar va a ser bienvenido. Está claro que la exigencia de un grupo como el Valencia es muy alta, y va a serlo así, porque también yo creo que es el carácter del valencianista. Entonces no digo que haya que ser conformista, pero todo lo que sea sumar y todo lo que sea una buena imagen aquí en el Bernabéu va a reforzar seguro a una plantilla tan joven. El partido no tiene esos tintes dramáticos como el que podemos estar hablando (el de 2008) , que era ya final de liga, que nos veíamos cerca del descenso y que había que sumar sí o sí".
El consejo a Javi Guerra
El ex valencianista sabe lo difícil que es llegar en el mundo del fútbol. Tal vez por eso se animaba a darle un consejo a Javi Guerra "parece que tiene un gran nivel y que para su juventud y el poco tiempo que lleva en la élite está demostrando muchísima personalidad y muy buen nivel de juego. Es una grata sorpresa y con un margen de evolución y de mejora grandísimo.", afirmaba. Y le recomendaba que "a veces llegar es muy difícil. Es que verse ahí, con reconocimiento social, con fama, en tu ciudad, o no en tu ciudad, pero alejado de tu entorno, ganando un dinero que en otra profesión a esa edad no se gana, es un cóctel, como dices, difícil de manejar y que yo creo que todos los jugadores, y quien te diga que no miente, en algún momento hemos tenido esa época de, bueno, me creo el mejor, de que lo que me diga a lo mejor mi entrenador, que tiene muchísimo más recorrido que yo en el mundo del fútbol, no es que lo desprecie, pero no le doy tanta importancia y me creo yo con la verdad. Y luego el tiempo te demuestra que estabas equivocado. Tiene que evitar que ese momento de ego personal sea el más corto posible, y a eso te ayuda también un entorno que no te diga siempre lo guapo que eres".
Y para ello Javi Guerra cuenta con la presencia, al igual que Arizmendi en su día, de Rubén Baraja. "Evidentemente tienen en el vestuario a un referente para el valencianismo que siente como nadie, que sabe como nadie lo que representa un club como el Valencia, y que como jugador no le voy a descubrir yo. Y como persona yo guardo un grandísimo recuerdo de él, porque además era de los veteranos que nos ayudaba a los más jóvenes".