El Teatro Flumen acoge la obra ganadora del Premio Max del Público el 18 y 19 de febrero
‘La vida empieza hoy’ es una historia inspirada en las vivencias del valenciano Tonet Ferrer, director del musical, y en la cercana relación con su madre
La vida empieza hoy homenajea la figura de una madre que nunca falla y es la obra ganadora del Premio Max del Público en los XXIV Premios Max de las Artes Escénicas. Una función que desarrolla la historia basada en las vivencias de Tonet Ferrer, su director, y en la relación cercana que tenía con su madre.
A través de este relato, el director ha sanado las heridas que le dejó el fallecimiento de su madre y ha confesado que la función nació de la necesidad de curar su corazón: “Silenciar lo que sentimos es perderse media vida y llegó un momento en el que yo necesitaba hablar”.
Surgió así la historia de Diego, el personaje protagonista, que es compositor y hace unos meses que no compone. Él ha perdido la inspiración, se siente desmotivado y le aterroriza enfrentarse al papel en blanco. En ese momento, aparece la persona más especial para sacarle del agujero: su madre. Ella le ofrece su ayuda para tomar de nuevo las riendas de su vida y él reanuda lo que más le gusta hacer: componer música.
La obra premiada la forman dos personajes: el actor Aitor Caballer, quien da vida a Diego; y su madre, interpretada por Pepa Chamorro. Estos artistas interpretarán a ritmo de ‘Un beso y una flor’ de Nino Bravo, ‘No dudaría’ de Antonio Flores o ‘Color Esperanza’ de Diego Torres, temas que al sonar harán florecer nuestras emociones.
Estas canciones serán cantadas en directo por Jordi Lérida, David Marín, José Miguel Marín y José Vicente Torrejón. Además, La vida empieza hoy es tan especial que ha contado con la colaboración audiovisual de profesionales como Loles León, Ferran Gadea, Sidonie, Ariel Rot y Christina Rosenvinge, entre otros.
Esta representación no solo homenajea a la madre de Tonet Ferrer, si no a todas las madres como personas indispensables en nuestras vidas. La vida empieza hoy refleja la realidad de parte de la sociedad que, en algún momento, se ha sentido perdida y ha necesitado un apoyo para reconducirse y salir adelante.