El Supremo ha rechazado el recurso presentado por la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV) y declara firme el fallo dictado en julio del año pasado por el Tribunal Superior, según ha informado en un comunicado el colectivo vecinal Russafa Descansa.Esta plataforma ha mostrado su satisfacción con la decisión del Alto Tribunal y anuncia que ahora exigirá al Ayuntamiento que, en cuanto se eliminen las limitaciones actuales por la pandemia, ejecute la sentencia del TSJCV y aplique a los locales de ocio del barrio las restricciones previstas en la declaración de ZAS. Russafa Descansa entiende que “con esta resolución firme del Tribunal Supremo, el Ayuntamiento de València deberá iniciar el procedimiento de declaración de Russafa como Zona Acústicamente Saturada” que promovió precisamente esta misma entidad en 2017.
La sentencia del Tribunal Superior ordenó al Ayuntamiento realizar “mediciones representativas”, de planificación y gestión en materia de contaminación acústica, a fin de iniciar el expediente de declaración del barrio como área ZAS. El fallo declaró nula una resolución municipal de agosto de 2017 por la que el gobierno local no estimó procedente el inicio de un estudio sonométrico previo tendente a la declaración de Russafa como Zona Acústicamente Saturada.
Russafa Descansa ha anunciado que reclamará una ZAS “amplia en su delimitación”. Cocretetamente, pedirá que se incluya la zona comprendida entre las calles Gibraltar y Filipinas, las avenidas de Peris y Valero y Reino de Valencia, y la gran vía Germanías, que coincide con el ámbito del Plan Especial de Protección de Russafa. Así mismo, el colectivo solicitará una declaración “lo más restrictiva posible” con los horarios, distancias y emisiones sonoras de los locales de ocio. Además, rechaza que para las mediciones se utilice la red de sonómetros colocados por el Ayuntamiento hace unos meses porque se instalaron de manera deliberada –dicen- alejados de las áreas con mayores problemas de contaminación acústica.