El Ayuntamiento aprueba el proyecto de remodelación del eje Pérez Galdós-Giorgeta
La Junta Local de Gobierno del Ayuntamiento de València ha aprobado el proyecto de intervención blanda previsto para ganar espacio peatonal de manera provisional en el eje Pérez Galdós-Giorgeta. Ambas avenidas perderán un carril por sentido para crear bandas peatonales que amplíen las aceras y una plataforma ciclista.
El proyecto supondrá la ampliación de las aceras hasta los cuatro metros de anchura creando banas peatonales sobre la calzada, con lo que se eliminará un carril por sentido para el tráfico rodado. Además se incluirá un carril bici unidireccional en cada sentido que compartirá espacio con la plataforma reservada a EMT y taxis, tal y como el que se ha hecho recientemente en la Gran Vía.
El Ayuntamiento licitará ahora el contrato de una obra que según ha explicado la concejala de desarrollo urbano, Sandra Gómez, permitirá mejorar la calidad de este espacio hasta que se acometa su remodelación definitiva. La también vicealcaldesa ha recordado que esa actuación permanente, que se desarrollará más adelante mediante un concurso de ideas, incluirá la desaparición del actual paso inferior. Gómez ha explicado que “los problemas de inseguridad y convivencia” generados por estas avenidas, que ha definido como “unas de las peores diseñadas de València”, requiere anticipar una actuación “de emergencia” como ésta.
La concejala ha añadido que esta intervención provisional permitirá aumentar hasta un 45 por ciento el espacio peatonal del eje Giorgeta-Pérez Galdos. La obra está presupuestada en un millón de euros y tendrá un plazo de ejecución de 4 meses. La zona de actuación abarca la longitud completa de las dos avenidas, que suman un total de casi 2,1 kilómetros de longitud, de manera que son varios los distritos y barrios que se verán beneficiados por esta actuación.
Descripción de las obras
Las obras consisten en la ampliación del espacio peatonal entre el Paseo de la Pechina y la calle San Vicente Mártir, además de la ejecución de un nuevo itinerario ciclista y de nuevos pasos de peatones. El objetivo principal se basa en garantizar la distancia interpersonal en la zona peatonal, así como en la separación entre los flujos peatonales de los ciclistas mediante un bordillo separador.
Actualmente las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta cuentan con aceras de ancho variable, según cada tramo, de entre 2 y 2,5 metros. Las futuras aceras tendrán un ancho constante de 4 metros, ganando espacio sobre la calzada. Esto supone que el peatón dispondrá de la acera actual y de una banda adicional en calzada. La delimitación de espacios se realizará mediante bordillos separadores, manteniendo el acceso a los garajes y ampliando los anchos de las paradas de autobús, todo ello de forma provisional.
También se crearán nuevos pasos de peatones y dos "placitas" en los cruces con las calles Jesús y Cerdà y Rico. En lo que se refiere a las plataformas para paradas de EMT, verán ampliada su anchura hasta el nuevo límite de las zonas peatonales. Se ejecutarán de 20 o de 30 metros de longitud, según si existe una o varias líneas de autobús.