La pesca es un sector estratégico y se merece todo el respeto y el máximo soporte por parte del consistorio, por lo que, ante la subida de gastos que debe asumir la Cofradía derivados de la imposición de las nuevas medidas por parte de la Unión Europea, ayudar a los marineros y trabajar junto ellos en la solución de sus problemas es de justicia.
Otras subvenciones que reciben los pescadores tardan más de un año en llegar y este apoyo del ayuntamiento vilero busca aliviar de una forma más rápida esas necesidades actuales, en un año en el que los marineros faenarán 123 días.
Además el consistorio estudia ampliarla para financiar la renovación tecnológica de las barcas.