Elche |
El Hospital General Universitario de Elche ha realizado con éxito su primera cirugía para la enfermedad de Parkinson. Lo ha llevado a cabo su unidad de Trastornos de Movimiento cuyos especialistas han implantado con éxito a un paciente de 68 años con esa enfermedad neurodegenerativa un sistema de estimulación cerebral profunda que mejora síntomas de la enfermedad como el temblor o la reducción de la movilidad en aquellos periodos de tiempo en los que el tratamiento médico para la patrología que sigue no ofrece ese resultado.
Se trata de una terapia personalizada que se puede aplicar a enfermos que cumplen unos requisitos concretos y por media de la que a través de electrodos se estimula áreas del cerebro previamente definidas por estudios de imagen por Resonancia Magnética.
El dispositivo se comunica con otro mecanismo, similar a un marcapasos, ubicado bajo la piel a nivel del tórax o abdomen y que es el encargado de realizar la estimulación cerebral siguiendo el programa que los especialistas han introducido en función de las necesidades del paciente.
La doctora Gloria González, jefa de servicio de Neurología del hospital, ha explicado que “de esta forma facilitamos el acceso de los ciudadanos no sólo a esta cirugía, sino también al seguimiento necesario posterior. Se trata de acercar la sanidad al ciudadano”.
La cirugía que se ha incorporado a la cartera de servicio del Hospital General ilicitano está destinada a pacientes aquejados de temblor esencial, Parkinson y distonía, que es el trastorno del movimiento que causa contracciones involuntarias de los músculos.
Se estima que se van a poder beneficiar de esa intervención quirúrgica alrededor de una docena de pacientes de Parkinson al año, al tiempo que una de las grandes ventajas de la implantación de esa técnica es que evitará el desplazamiento de los pacientes al Hospital La Fe de Valencia, que ha sido hasta ahora centro de referencia de esa cirugía en la Comunitat Valenciana.
Para llevar a cabo la intervención, los profesionales del hospital ilicitano se han formado previamente, contando para ello con la colaboración del doctor Francisco Escamilla del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, pionero hace treinta años en ese tipo de intervención y referencia nacional en trastornos del movimiento.