El cien por cien del agua tratada en la nueva depuradora de Algorós de Elche será reutilizable y se eliminarán los malos olores

La Conselleria de Transición Ecológica estima que a finales de 2023 se puede estar en disposición de iniciar las obras de reforma integral de la depuradora de Algorós de Elche, que supondrá una inversión por parte de la Generalitat Valenciana de unos 50 millones de euros.

El proyecto constructivo ha sido presentado este viernes en un acto celebrado en el centro de congresos ‘Ciutat d’Elx’ que ha estado presidido por la consellera de Transición Ecológica, Mireia Molla, y el gerente de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas (EPSAR), Juan Ángel Conca.

La iniciativa se llevará a cabo en cuatro fases y la nueva estación depuradora que resultará de la rehabilitación que se va a ejecutar tendrá una capacidad máxima para tratar 13 hectómetros cúbicos de agua, si bien comenzará a funcionar depurando ocho hectómetros cúbicos. El cien por cien de ese volumen de agua será apto para regadío.

La nueva planta depuradora de Algorós dispondrá de un parque fotovoltaico de 12.000 metros cuadrados de superficie que producirá 2.5 gigavatio-hora al año. Estará dotada con medidas que evitarán la emisión de malos olores, que es uno de los principales problemas que presenta la actual estación depuradora. Para ello, las zonas de la nueva instalación susceptibles de emisión de malos olores tendrán cerramientos herméticos. La integración de la depuradora con la vegetación del entorno también favorecer la eliminación de esos malos olores.

El gerente de la EPSAR ha explicado que la nueva propuesta "incrementa la calidad del efluente de la depuradora y su eficiencia energética, gracias a la instalación de placas fotovoltaicas y de sistemas de tratamiento de bajo consumo energético, como el secado solar de los lodos".

A partir de ahora, la empresa adjudicataria del proyecto dispone de 12 meses para redactar el proyecto definitivo, y desde ese momento se podrá proceder a la licitación y adjudicación de la obra.

Mireia Mollà ha subrayado “el impacto inmediato de la infraestructura en el impulso económico de la ciudad, además de la mejora medioambiental evidente y el fin de las molestias para el conjunto de vecinos y vecinas que viven en las inmediaciones de la actual depuradora".

Por su parte, Carlos González, alcalde de Elche, ha recordado que "la nueva depuradora resuelve uno de los principales problemas urbanos que tiene Elche con el ciclo del agua y es un pilar fundamental en el trabajo hacia nuestro objetivo de ser Capitalidad Verde Europea en 2030".