ANÁLISIS

La caída del Elche

¿Qué le ha pasado al Elche para no entrar en la promoción de ascenso a Primera División? Una pregunta sin una respuesta única y clara; aquí, algunas claves

Monserrate Hernández

Elche |

Sebastián Beccacece, entrenador del Elche, junto a su segundo técnico, Guille Marino | LaLiga

El 24 de marzo el Elche CF llegaba al minuto 60 de partido, en el Ciutat de València, con 0-2 en el marcador. Ventaja labrada gracias al mejor fútbol de la temporada, siendo muy superior al Levante en su estadio. Pocos minutos después, llegó el principio del fin. En el minuto 68, el Levante marcada de penalti y el conjunto de Sebastián Beccacece comenzó a tambalearse. Desde entonces, sólo seis puntos sumados de los últimos 30 disputados; o lo que es lo mismo, una victoria (ante el Sporting de Gijón) y tres empates (Real Zaragoza, Espanyol y Mirandés) en el momento clave de la competición. ¿Qué le ha pasado al Elche? Una pregunta sin una respuesta única y clara. Aquí, algunas claves.

Falta de pegada

El Elche CF ha sido el equipo que más remates en el área rival ha protagonizado a lo largo de toda la temporada en Segunda División. Sin embargo, la falta de pegada ha sido el talón de Aquiles del equipo. La pena es que esa estadística no fuese de eficacia. Todo el mundo coincide en que con otros delanteros, al menos con un '9' solvente, el equipo hubiese estado arriba.

Jugadores del Elche CF calentando en la previa del partido ante el CD Eldense | LaLiga

En la recta final del mercado veraniego se marcharon Lucas Boyé, Ezequiel Ponce y Pere Milla a cambio de suculentos traspasos. Con ese dinero, no se apostó por buenas alternativas. Llegó cedido Borja Garcés y se mantuvo a Mourad, cuyo mejor registro goleador era de tres tantos en el Burgos. Sergio León fue la apuesta de última hora, aunque sus características, siendo hombre de área no acostumbrado a un gran despliegue físico, no convenció a Beccacece. Óscar Plano se erigió como el máximo goleador, con siete tantos hasta Navidad, pero luego estuvo cuatro meses lesionado. En enero llegó Manu Nieto, que ha despedido la temporada sin estrenar su cuenta particular.

Desfondados físicamente

“En el Elche, los partidos son más fáciles que los entrenamientos”. Son palabras del centrocampista Arnau Puigmal días después de perder ante el Levante. Donde parecía que estaba la virtud, terminó habiendo un problema. Los jugadores más utilizados por Sebastián Beccacece han terminado desfondados y con numerosos problemas físicos: Carlos Clerc, Mario Gaspar, Sergio Bermejo, Josan Ferrández, Sergio Carreira, Tete Morente...

Juanto Ortuño celebra el 0-1 del CD Eldense en el estadio Martínez Valero. | LaLiga

Sólo 12 futbolistas de campo han terminado por encima de los 1300 minutos de competición. El resto, ha estado por debajo de los mil. Un recorrido en el tiempo a máxima intensidad y con poco descanso en los entrenamientos, con semanas que, en ocasiones, han sido completas, sin apenas parar, tras resultados que no fueron positivos.

Discrepancias con los servicios médicos

Sebastián Beccacece siempre ha sido muy exigente. Y siempre ha pedido máxima implicación a su entorno. Los servicios médicos querían que los jugadores tuvieran algún descanso más durante la semana para recuperarse bien de sus molestias y no siempre se atendían a estas indicaciones. Con el doctor César Quesada terminó por no haber sintonía, fue despedido y se apostó por quedarse con su segundo, Ennio Priori. Hubo futbolistas que terminaron por romperse o rendir por debajo de su nivel ante esa situación.

Muchos nervios en los malos momentos

Con la llegada de los malos resultados, el ambiente se fue enrareciendo en el vestuario del Elche. Además del doctor César Quesada, Beccacece chocó con el preparador de porteros Miguel Escalona, que también fue destituido. Estas decisiones no cayeron bien en el vestuario por la buena relación con ambos, que llevaban varios años en la entidad. Jugadores que dejaron de contar para el entrenador terminaron olvidados por el técnico, como Aleix Febas, Rodrigo Mendoza, Manu Nieto, José Salinas o Borja Garcés, en su momento. En el mercado de invierno también se marcharon veteranos como Edgar Badia, Fidel Chaves o Sergio León., y otros que no encontraron sitio, como Lautaro Blanco o Álex Martín.

De lo que pudo ser y no fue

Una vez finalizado el trayecto hacia el sueño del ascenso, florecen todos los aspectos negativos de la forma de entrenar de Beccacece. Sin embargo, también hubo muchos aspectos que ilusionaron al entorno y que es justo recordar. El estilo de juego del técnico argentino, cuestionado en la recta final de Primera División y en las nueve primeras jornadas de Liga en Segunda, terminó por ganarse el cariño de la gente y de gran parte del entorno. Un fútbol que encontró en el Elche su mejor expresión durante los tres primeros meses de 2024, llegando a alcanzar el ascenso directo en las jornadas 30ª y 31ª.

El ambiente en el vestuario, mientras los resultados fueron buenos, era inmejorable, pese al particular método de trabajo del entrenador, encerrado en sus dos hombre de confianza en las charlas (el segundo Guille Marino y el preparador físico Martín Bressan). La figura del kinesiólogo José Ernesto generó algunas grietas más en el vestuario por sus métodos paralelos a la medicina, tratando de encontrar lesiones o mermar dolores mediante técnicas y ejercicios de relajación muscular e, incluso, emocionales.

El trato de Beccacece hacia el aficionado y el entorno ha sido muy cercano. Siempre le dio mucho valor a la grada y a su confianza por el sentido de pertenencia. Cierto es también que, en varias ocasiones, no fue capaz de aceptar muchas de las críticas que le llegaron.

La afición del Elche CF, en el partido ante el CD Eldense | LaLiga

De lo que pudo que ser a lo que no fue y que ha terminado por dejar al Elche en Segunda División. De haber apostado algo más fuerte por el ascenso, el equipo ahora podría estar en otra situación.