Joaquín Ferrándiz consigue la libertad. El asesino en serie ha abandonado esta mañana la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) donde cumplía condena por los asesinatos y violaciones de cinco mujeres, que perpetró en la provincia de Castellón.
A su salida de prisión, JoaquínFerrándiz ha atendido a los medios de comunicación presentes a las puertas de la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real). En apenas veinte segundos, que ha tardado el asesino en subir al taxi, Ferrándiz ha confesado que "por respeto a las víctimas no volveré a Castellón" y se marchará al extranjero. El hombre también ha comentado que ya pidió perdón a las víctimas y a la pregunta de un periodista de sí se arrepiente de sus crímenes, ha contestado "claro".
El 20 de noviembre de 1995, asesinó a Sonia Rubio en Oropesa del Mar, tras asaltarla a la salida de la discoteca. Entre finales de enero y principios de febrero de 1996, asesinó a Natalia Archelós, Mercedes Vélez y Francisca Salas. Estas tres aparecieron con signos de ser violadas y estranguladas. Casi un año después, Joaquín Ferrándiz asesinó a Amelia Sandra.
Fue detenido en 1998 cuando intentó asaltar a dos mujeres más. No obstante, el primer delito de Joaquín Ferrándiz se remonta a 1989, cuando fue condenado a 14 años de prisión por violar a una mujer. Sin embargo, cumplió menos de seis en prisión.