Aunque no avanza, el fuego sigue devorando uno de los pulmones verdes más valiosos de la provincia de Castellón. La humedad de la noche y las bajas temperaturas han jugado un papel fundamental a favor de que el incendio no atravesara la carretera entre Montán y Montanejos y avanzara hacia el Parque Natural de la Sierra de Espadán.
A primera hora de hoy se incorporaban 18 medios aéreos a los trabajos que no han cesado durante la noche con 500 efectivos terrestres, aún así el fuego, que ocupa una extensión de 3.800 hectáreas y un perímetro de 35 kilómetros, sigue sin poderse controlar. En la extinción participan brigadas de toda la Comunitat Valenciana y de Murcia además de la UME. En breve se incorporarán los medios de la Comunidad de Madrid.
El viento, de componente sur, y las altas temperaturas dificultan las tareas de extinción que, a esta hora, son más desfavorables para el frente Aragonés que para el de Castellón, aunque en cualquier momento podría cambiar la situación y eso obligar a trazar nuevas estrategias.
La Guardia Civil ha reforzado la vigilancia en los 8 pueblos y municipios desalojados ante los reiterados intentos de algunos vecinos de acceder a sus propiedades. De momento las llamas no han llegado a los núcleos urbanos.
Un total de 1.500 vecinos de Villanueva de Viver, Montán, Montanejos, Arañuel, Puebla de Arenoso, Fuente la Reina, Los Cantos, Los Calpes y La Monzona, pasarán hoy su tercera noche fuera de casa, algunos en los dos albergues que Cruz Roja ha habilitado en Segorbe y Onda. En el caso de Teruel hay 250 vecinos desalojados de los municipios de Olba y San Agustín. Muchas personas se han refugiado en casa de familiares directos esperando que esta pesadilla finalice cuanto antes.