El conflicto con la apertura de los chiringuitos en las playas de Castelló está servido. Los empresarios piden abrir antes del 1 de julio y anuncian que si la cosa se retrasa podrían dejar el concurso desierto. Mientras, los ecologistas reiteran que si se abre antes de esta fecha acudirán a la fiscalía.
Por su parte, la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, ha manifestado su intención de alargar la temporada de los 8 negocios que han presentado sus propuestas, aunque la decisión es del Ministerio de Medioambiente. Los empresarios reconocen que la situación está tensa y aceptarían abrir el 1 de julio pero nunca más tarde, ya que la rentabilidad de sus negocios quedaría comprometida lo que les haría plantearse dejar el concurso desierto.
Las reivindicaciones de los empresarios que chocan con los intereses ecologistas. El grupo ecologista GECEN reitera que si se les da permiso a los chiringuitos, antes del 1 de julio, volverán a recurrir a la fiscalía. Manifiestan que el PATIVEL, Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral, lo aprobó el partido que gobierna en el ayuntamiento y delimita perfectamente el respeto a la fauna y flora de las playas.
Estos intereses enfrentados no permiten a los empresarios tomen decisiones de contratación de personal ni infraestructuras a tan solo un mes y medio del inicio de la campaña estival.