Las sedes del PSOE y del PCE de Alicante sufren sendos actos vandálicos
Los socialistas se han encontrado con la cerradura bloqueada y la sede comunista tenía cristales rotos
Alicante | 17.11.2023 16:47
El PSOE de Alicante ha presentado una denuncia en la Policía Nacional al sufrir un nuevo acto vandálico su sede. La cerradura de la sede de Pintor Gisbert ha sido dañada lo que ha hecho imposible el acceso a las instalaciones.
El secretario general del PSOE de Alicante, Miguel Millana, ha llamado “salvajes” a los autores y ha acusado directamente a la extrema derecha. También ha pedido al responsable del PP en Alicante, Luis Barcala, que condene de forma inequívoca "unos actos que atentan contra la convivencia en la ciudad", de la que además es el alcalde.
Millana ha alertado de que el vandalismo va en aumento y es necesario que el partido que gobierna esta ciudad lance mensajes de convivencia y solidaridad hacia el PSOE. Ha precisado que ambos partidos son rivales políticos pero tienen un enemigo común: las personas intransigentes de la extrema derecha que están atacando casas del pueblo sin ninguna impunidad y poniendo en peligro la convivencia entre alicantinos y alicantinas.
El dirigente socialista ha exigido, "por el bien de todos", que cese este vandalismo que no conduce más que "a crear crispación de forma irracional en una sociedad que debe afrontar unos retos donde tanto PSOE como PP tienen un papel fundamental".
TAMBIÉN EN PINTOR MURILLO
No ha sido el único ataque. En la tarde del jueves, militantes del PCE de Alicante encontraron varios cristales rotos en su local, situado en la calle Pintor Murillo. Según han señalado fuentes de la formación política, la sede ya ha sufrido ataques en otras ocasiones. Habitualmente, con pintadas fascistas firmadas por Falange, "pero hasta ahora no se habían atrevido a rompernos cristales”.
El PCE responsabiliza a quienes han protagonizado, durante días, protestas frente a la sede del PSOE. En su opinión la situación es paradójica; la ultraderecha se está radicalizando y pretende apropiarse de la rebeldía, de la calle y de la movilización. Son los comunistas, afirman, quienes deben "seguir protestando y movilizándonos". Con independencia de quien gobierne, porque las condiciones de vida de muchas personas son cada vez más precarias.
Desde el PCE señalan que no van a detener su actividad. “La semana que viene saldremos a la calle para conmemorar el 25 de noviembre, (día internacional contra la violencia de Género] y las semanas siguientes seguirán celebrando actos culturales y encuentros", han zanjado.