Los fugitivos también se van de vacaciones

Días de viajes, de idas y venidas, y, por supuesto, de vacaciones. La provincia de Alicante recibe a más de 14 millones de visitantes de todo el mundo que aprovechan para escapar de la rutina... aunque algunos también lo hacen de la justicia.

Agentes de la Policía Nacional han detenido en un hotel del centro de la ciudad de Alicante a un prófugo que se ocultaba de la justicia belga, que le reclamaba por delitos de homicidio, robo armado, pertenencia a banda organizada, secuestro y detención ilegal con toma de rehenes.

La operación se ha iniciado a raíz de que agentes del Centro Inteligente de Mando Comunicación y Control hayan averiguado que un cliente hospedado en un hotel de Alicante estaba reclamado por la justicia belga por diversos delitos de "naturaleza grave".

Dos patrullas del Grupo de Atención al Ciudadano de la Comisaría Provincial de Alicante localizaron y detuvieron al fugitivo, que en esos momentos se encontraba en su habitación, según ha informado la Policía Nacional.

Los agentes han localizado al prófugo en su propia habitación y, tras identificarle y constatar que se trataba de la persona sobre la que pesaba la orden de detención internacional, le han arrestado y trasladado a la Comisaría Provincial de Alicante.

Acusado de homicidio, robo armado, secuestro, pertenencia a banda organizada y detención ilegal con toma de rehenes

Según la orden de detención internacional, el fugitivo, en 2022, tan solo 10 días después de salir en libertad condicional de una prisión de Bruselas, donde había cumplido una pena desde 2018 por robo con violencia, pertenencia a grupo criminal y detención ilegal, junto con un cómplice participó en el robo con violencia a una farmacia en la localidad belga de Thuin y, tras cometer el robo, huyó en un vehículo.

Seguidamente, comenzó una persecución policial en la que los asaltantes llegaron a conducir en sentido contrario a alta velocidad por las calles de la población, poniendo "en serio peligro" a otros usuarios. Finalmente, el vehículo de los autores quedó inmovilizado en un callejón sin salida de una zona residencial y ambos individuos trataron de huir a la carrera del lugar. Sin embargo, gracias a los refuerzos policiales que llegaron al lugar, los agentes consiguieron detenerles.

Tras estos hechos, el fugitivo intentó ocultarse de la justicia belga afincándose en España, por lo que el juzgado belga acordó la revocación de la libertad condicional que le fue concedida, y decretó el cumplimiento de la pena que le quedaba pendiente de siete años y medio, para lo que dictó una orden europea de detención para extradición.

El detenido, de nacionalidad italiana y de 34 años, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de la Audiencia Nacional competente para ejecutar la orden de extradición.