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A la constante presión hospitalaria por la pandemia de la covid-19 ahora se ha unido en las últimas horas las urgencias médicas por caídas debido a la nevada. Ayer, la ministra de Defensa, Margarita Robles, afirmó que los responsables del hospital Gómez Ulla de Madrid le trasladaron su preocupación por la alta afluencia de personas a las urgencias debido a las caídas.
En las últimas horas las bajas temperaturas, de hasta 12 grados negativos, han convertido en hielo la nieve dejada por el temporal Filomena, creando una capa "extremadamente resbaladiza", que hace
que caminar por la calle sea un peligro en muchas zonas. Los hospitales madrileños han atendido ya más de 1.200 urgencias traumatológicas, una cifra que representa un tercio de las urgencias.
Madrid 112 atendió 411 incidencias por caídas entre las 6:00 y las 18:30 del lunes en toda la región, según ha informado Emergencias 112 Comunidad de Madrid y en las últimas 24 horas, Samur-Protección Civil ha realizado 294 intervenciones en la capital, 169 de ellas por los golpes de los viandantes en las calles de la capital, según ha indicado Emergencias Madrid.
Por ello, la Comunidad de Madrid pide a las personas mayores que no salgan de sus casas ya que en este caso una caída puede suponer consecuencias graves.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, también ha pedido durante su entrevista en Más de uno que los ciudadanos que tengan que salir a la calle lo hagan "con el calzado y la vestimenta adecuada" y ha insistido que en ningún caso es recomendable para las personas que tengan algún tipo de limitación en la movilidad. Además, ha indicado que "no hay peligro por donde las maquinas quitanieves han pasado y hay sal, pero pide a los ciudadanos que limiten sus movimientos y que si cogen el vehículo privado sea solo si es imprescindible.
Para evitar posibles caídas se recomienda usar calzado con agarre pero sin una suela gruesa y no se pierda el contacto y tiene que ser atado y bien ajustado al pie.
Para andar sobre el hielo se debe hacer marcha tipo pingüino, con pasos pequeños con el cuerpo ligeramente inclinado hacia delante, para evitar caer de espaldas, y pisar por zonas donde
todavía quede un poco de nieve, menos propensas a provocar resbalones.
También hay que tener cuidado con los "elementos inestables que todavía se encuentran en las calles, como ramas de árboles y contar con elementos de apoyo como bastones y hay que tener cuidado si se llevan gafas porque se pueden empañar e impedir ver por donde pisamos.