La Policía Nacional ha detenido en Argentona, en un pueblo de Barcelona, a un hombre por presuntamente ser autor de los delitos de corrupción de menores, pornografía infantil y agresión sexual.
De momento se ha identificado a nueve víctimas, aunque han sido intervenidas imágenes con más de 70 menores diferentes.
El arrestado, que ha ingresado en prisión, utilizaba su domicilio particular para invitar a menores a dormir, habiéndose ganado previamente la confianza de sus padres.
Allí presuntamente les fotografiaba y grababa las relaciones sexuales mantenidas incluso mientras los niños dormían. En el registro del domicilio se encontraron carpetas con fotografías y vídeos pornográficos en los que aparecía manteniendo relaciones sexuales con menores de entre 10 y 12 años.
Además, se ha podido constatar que el detenido se desplazó a distintos puntos de España, incluso al extranjero, para cometer hechos similares.
La investigación se inició en abril de 2023, a consecuencia de una solicitud de colaboración desde Santa Cruz de Tenerife (Canarias), donde estaban investigando una denuncia de grooming --delito en el que un adulto se hace pasar por menor en Internet--, en la que la víctima era un menor de 11 años, y vieron que el ordenador desde donde se conectaba estaba en Argentona.
Tras varias gestiones, los agentes averiguaron que el investigado trabajaba en una entidad que realizaba actividades de ocio dirigidas a niños y jóvenes de 3 a 17 años.
Tras una autorización judicial, los agentes registraron el domicilio del investigado y encontraron "numerosas evidencias digitales con conversaciones mantenidas con el menor de 11 años que dio inicio a la investigación" y carpetas con fotografías y vídeos pornográficos en los que aparecía teniendo sexo con menores.
Los agentes también detuvieron a la pareja del hombre, ya que también participaba en los encuentros sexuales con los menores, y en la casa organizaban fiestas con menores. Además, se arrestó a un exalumno con el que compartía material pedófilo.
Los agentes sospechan que pueda haber más menores afectados que no han denunciado los hechos por vergüenza o miedo a represalias. Por ello hacen un llamamiento a cualquier posible víctima o sus familiares a que denuncien ante la Policía Nacional para poder actuar contra el detenido.