Después de que el gobierno de Pedro Sánchez haya aprobado bonificar el precio del carburante, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha reclamado al ejecutivo español que siga el ejemplo del alemán y también ayude a los usuarios del transporte público. En una entrevista en TV3, Colau ha propuesto rebajar a la mitad el precio de la T-usual, la más utilizada, durante tres meses. De esta manera, en la zona de tarificación 1 el abono pasaría de 40 a 20 euros al mes.
Colau ha reconocido que la propuesta debía consensuarse con el resto de administraciones que gestionan el transporte público metropolitano.
En declaraciones a los medios de comunicación, el vicepresidente y consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Jordi Puigneró, ha criticado que Colau haya hecho este anuncio sin tener en cuenta que tendrá un impacto de 50 millones en las arcas públicas. "Pediría a Ada Colau que, cuando haga este tipo de propuestas, vaya con el cheque en mano. Creo que hace falta responsabilidad en este tipo de anuncios que, además, no tiene que pagar ella", ha apuntado Puigneró.
Desde Promoción por el Transporte Público, su portavoz, Daniel Pi, ha calificado la propuesta de "interesante" en una entrevista a Onda Cero Cataluña, en línea con lo que se ha hecho en otros países europeos. Según Pi, si el gobierno ha podido asumir el coste para beneficiar a los usuarios de la gasolina, también debería hacer lo mismo con los del transporte público.