Un brote de gripe aviar obliga a sacrificar a más de 130.000 gallinas en Íscar
El brote afecta a 32 explotaciones, 18 en Segovia y 12 en Valladolid, la mayoría son de producción de carne
Declarado un nuevo foco de gripe aviar en Castilla y León en una explotación de gallinas de la localidad vallisoletana de Íscar que obliga a sacrificar a 133.750 ponedoras. Se vigilará el entorno con seguimiento diario en un radio de tres kilómetros de la explotación y se controlarán los 10 kilómetros próximos al brote en los que hay 32 granjas, 18 en Segovia y 12 en Valladolid con más de 1 millón de aves. Desde la Junta, se recuerda que no tiene influencia en la salud humana por la baja trasmisión del virus y se estudia cuál ha podido ser la causa del brote que preocupa especialmente por su proximidad con otras explotaciones, un total de 32, 18 en Segovia y 12 en Valladolid, la mayoría son de producción de carne.
Es el segundo caso en el que el virus afecta a especies domésticas en la Comunidad, después de que el pasado mes de enero se decretara el primero en la localidad segoviana de Fuenterrebollo con casi 19.000 pavos sacrificados y donde no se ha producido ningún nuevo contagio.
El director general de Producción Agropecuaria, Agustín Álvarez ha mostrado su "preocupación" por la zona de influencia donde se ha producido este foco, la de Olmedo, con multitud de explotaciones avícolas, si bien ha vuelto a hacer un llamamiento a la "tranquilidad" porque el virus tiene "baja transmisibilidad" para el humano.
En esta zona de restricción se toman medidas que comprenden la prohibición, con carácter general, de los desplazamientos de aves desde o hacia esa zona, la repoblación de aves de caza, la celebración de ferias, mercados, exposiciones y otras concentraciones de aves. Del mismo modo, hay restricciones a los desplazamientos de huevos para incubar, de consumo y de productos de carne de aves.