Según UGT los infartos y derrames cerebrales son la primera causa de mortalidad laboral en Palencia

El 70 por ciento de los accidentes mortales en el trabajo registrados en Palencia en lo que llevamos de 2022 se debieron a infartos, derrames cerebrales, ictus y otras patologías no traumáticas. Según el informe de siniestralidad laboral emitido por la Junta de Castilla y León con el avance de datos provisionales hasta el mes de octubre de 2022 de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, se han producido en Palencia y provincia seis accidentes mortales, uno de ellos in itinere. Más en concreto, uno de los accidentes laborales mortales ha sido en la rama de la construcción por causa de un desvanecimiento y de los cuatro producidos en el sector servicios, tres de ellos han sido ocasionados por infartos y desvanecimientos. Además, tenemos que sumar un accidente muy grave en el área de la administración pública (ictus-derrame cerebral) y dos accidentes graves, uno en el sector del transporte (infarto) y otro en el área industrial donde el trabajador sufrió un desvanecimiento con el posterior golpe en la cabeza.

UGT Palencia subraya que en los últimos años el número de accidentes laborales por patologías no traumáticas han ido en aumento sin cesar, tanto en Palencia como en España. Carga de trabajo, horarios, trabajo a turnos, estrés laboral, contaminantes químicos y otros factores ligados a las condiciones de trabajo contribuyen al aumento de riesgo cardiovascular, por lo que son factores que dentro del ámbito laboral se deben controlar y prevenir. Según precisa el responsable provincial del sindicato, Gorka López,“los riesgos psicosociales siguen siendo los grandes olvidados. Este incesante aumento de las muertes y accidentes graves en el ámbito laboral obliga a tomar medidas para solucionarlos con más prevención específica”. “Es evidente que la pandemia ha tenido un gran impacto en la salud mental, especialmente entre las trabajadoras del sector sanitario o socio sanitario y los de primera línea, aunque el resto de población trabajadora también los ha sufrido por los confinamientos, el miedo al contagio o la pérdida de empleo. Cada vez existen más patologías asociadas al estrés o la ansiedad lo que repercute en el aumento de los infartos o derrames cerebrales”. El hecho de que estas enfermedades se consideren como accidentes de trabajo, se basan en que ocurran durante el tiempo y en el lugar de trabajo. “Sin embargo cuando estas enfermedades se producen fuera del lugar de trabajo se hace un hecho casi imposible para el trabajador o familiares demostrar que ha venido derivado de los efectos negativos de una mala organización del trabajo, del estrés provocado en la jornada laboral y de las ampliaciones de los horarios de trabajo entre otros muchos factores”.

Ante esta situación, “debemos seguir buscando mecanismos y herramientas que mejoren las condiciones de trabajo y por tanto la salud y seguridad de la población trabajadora” ha puntualizado el responsable provincial del sindicato que considera que “la mayoría de los accidentes se pueden evitar con sencillas medidas preventivas”. Las empresas deben cumplir con la legislación vigente realizando la evaluación de riesgos psicosociales y aplicando las medidas correctoras, “no es suficiente con la implantación de programas de promoción de la salud en el ámbito laboral ya que no actúan sobre el origen del problema: los riesgos psicosociales.” Por ello desde UGT Palencia proponemos, que a través del Dialogo Social en Castilla y León se refuercen los Planes de Acción enmarcados dentro del VI Acuerdo para la prevención de riesgos laborales, integrando los riesgos psicosociales en la gestión preventiva global de la empresa y contar con la activa colaboración de todos los agentes implicados, aumentando también los recursos humanos de la Inspección o los técnicos de Seguridad y Salud Laboral, que cuentan en la actualidad con una plantilla muy insuficiente.