Las obras se realizan en los cuatro módulos de la prisión, y también se van a reformar la enfermería, la cocina, las celdas y la instalación de duchas individuales con el fin de evitar las colectivas. Además, está previsto mejorar la seguridad e instalar una planta de energía fotovoltaica para autoconsumo del centro. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ha acometido, además, la remodelación integral de los locutorios.
El subdelegado del Gobierno de España en Ciudad Real, David Broceño, ha visitado el centro penitenciario de Herrera de la Mancha acompañado por su director, Marceliano García-Catalán, para conocer estas actuaciones.
En la visita a las instalaciones, David Broceño ha conocido el trabajo que llevan a cabo los profesionales del centro, así como las diferentes dependencias del penal, que datan de 1979, cuando era considerada la primera cárcel de máxima seguridad del país.
El centro penitenciario Herrera de la Mancha cuenta con una población reclusa de 391 internos, cifra que se mantiene estable en los últimos años, y cuya mayoría se encuentra en segundo grado.
La plantilla del centro penitenciario es de 223 funcionarios y personal laboral. A esto hay que añadir cinco maestros de Educación Primaria y un profesor de Secundaria.
También desempeñan su labor diferentes ONG de la provincia, como Proyecto Hombre, Cruz Roja, Cáritas Siloé y Plena Inclusión, que colaboran con el centro.