Gran parte de su vida estuvo vinculada a la capital española

Madrid rinde homenaje a Gregorio Prieto

El Ayuntamiento de Madrid ha colocado una placa conmemorativa en el edificio que albergó su residencia y estudio en la Avenida General Perón nº 13.

Mª Ángeles Díaz Madroñero

Valdepeñas |

Fue en Madrid, ciudad a la que Gregorio Prieto se traslada desde Valdepeñas siendo un niño, donde pasa gran parte de su vida. En la capital española nace su vocación artística y es allí donde conoce, y entabla amistad, con un grupo de jóvenes que ahora conocemos como la Generación del 27, algo que influye y define gran parte de su trayectoria.

Después de su exilio en Inglaterra, a raíz de la Guerra Civil, Gregorio Prieto regresa a Madrid en 1950 y, después de residir brevemente en otro lugar, se instala en un piso de la Avenida General Perón, donde vive y tiene su estudio durante más de veinticinco años.

Es en este lugar una placa recuerda ahora la figura del pintor valdepeñero, su vínculo con Madrid y su contribución al arte y la cultura, como señala María Concepción García-Noblejas, presidenta de la Fundación Gregorio Prieto.

Gregorio Prieto en su estudio pintando El centro del mundo (ca. 1965) | Fundación Gregorio Prieto

Este homenaje al pintor más representativo de la Generación del 27 ha tardado en llegar, ha pasado más de una década desde que la Fundación y los propios vecinos del edificio hicieron la propuesta. Las administraciones públicas tienen sus tiempos, reconoce García-Noblejas, aunque esto no es hoy tan importante porque su figura y su legado perduran en el tiempo.

El edificio, donde ya luce la placa conmemorativa, alberga en la actualidad la sede de la Fundación Gregorio Prieto, impulsada por él mismo con el fin de gestionar su Museo en Valdepeñas, preservar su memoria, difundir y conservar su obra.