Valdepeñas es un ejemplo, aquí las altas temperaturas sostenidas están ocasionando un alto estrés hídrico al arbolado y los espacios ajardinados de las zonas urbanas y periurbanas, agravado por una prolongada sequía, con un descenso del nivel freático, y una falta de humedad del terreno, que no solventaron las lluvias registradas en abril.
El teniente de alcalde de Medio Ambiente del Ayuntamiento, Gregorio Sánchez Yébenes, explica a Onda Cero que se está reforzando el riego con camiones, en las primeras y últimas horas del día, aun así, algunos árboles y plantas se están secando.
Los dos pulmones verdes de Valdepeñas fuera del casco urbano sufren también las consecuencias del intenso y continuado calor. En El Peral los pozos para el riego por goteo se han secado, aunque es más sencillo llegar con cisternas de agua. Mayores dificultades atraviesa el paraje de Las Aguas, con zonas de complejo acceso y donde no hay mecanismos para regar, ya que se mantenía gracias a la humedad del subsuelo y la lluvia, explica Sánchez Yébenes.
El responsable municipal de Medio Ambiente avanza que, ante un escenario climático cada vez más seco, el Consistorio estudia alternativas para preservar Las Aguas.
Mientras, en el contexto actual, Gregorio Sánchez Yébenes cree que puede haber pérdidas puntuales: zonas visiblemente secas, pero recuperables, como las praderas de El Peral, y también ejemplares de árboles que no sobrevivan a esta situación de calor intenso con temperaturas altas constantes.