Surge a comienzos del siglo XX a partir de las ideas del filósofo austriaco Rudolf Steiner y, en la práctica, se traduce en un tipo de agricultura de conservación que emplea los recursos de forma responsable, evita pesticidas o compuestos tóxicos y artificiales, y adecúa sus prácticas y calendario a los ciclos naturales.
Explica a Onda Cero el productor biodinámico Ángel Simón, que elabora en su explotación de Torrenueva vino Albores y aceite de oliva virgen Verísima Natura: "Se basa en una agricultura de conservación que, además, integra las energías. Hacemos homeopatía, intentamos curar plantas con otras plantas a no ser que hubiese un desajuste mucho mayor".
Esta opción, ecológica, sostenible y respetuosa con la tierra, no necesita más tiempo o inversión que la agricultura tradicional e incorpora los avances tecnológicos. Para Simón se trata de armonizar una forma de hacer agricultura con la rentabilidad de esta actividad económica: "Nos lo va a imponer el consumidor, cada vez esta más concienciado de que, para estar sano, hay que tener alimentación saludable y una relación sana con el planeta. Hoy somos menos, pero cada vez más. Es tan rentable como cualquier otra agricultura".
Los productos de la agricultura biodinámica tienen un valor añadido para los consumidores, alimentos sanos, con un origen respetuoso con los ecosistemas y la naturaleza que contribuye a “una economía perdurable en el tiempo”.
En la provincia de Ciudad Real hay una veintena de agricultores que han incorporado a sus explotaciones la agricultura biodinámica, alrededor de media docena en nuestra comarca.