En rueda de prensa, Nuria Garrido ha afirmado que este caso ha dejado dejado al descubierto la verdadera estrategia del PP del señor Velázquez: la mentira y la calumnia como forma de gobernar. “Mintieron con una denuncia falsa; intentaron desacreditar a la exalcaldesa filtrando el auto judicial a medios locales y nacionales, con nocturnidad y alevosía; el PP actuó sabiendo que todo era mentira y omitieron información al juez”, ha explicado.
Para la viceportavoz, Juanjo Alcalde ha quedado en evidencia ante la justicia, ante la ciudad de Toledo y ante sus propios compañeros concejales del PP de la pasada legislatura, que “le han dado una lección de dignidad ya que no todo vale para vivir de la política y hacer méritos ante su líder, Carlos Velázquez” e insiste en que el auto del juez deja claro que no existe delito y sentencia a Juanjo Alcalde como “mentiroso oficial”.
Nuria Garrido ha apuntado que Velázquez está empujando al PP “al radicalismo más absoluto” y acuña una nueva corriente, “el trumpismo toledano”, que consiste en mentir y difamar, atacando personalmente a quien le precedió en el cargo y le ganó en las urnas.
Y es que los concejales del PP que se retiraron de la querella “han dejado solo y en evidencia a quien entiende la política como el arte de difamar, calumniar, insidiar y de difundir bulos y fakenews, sostenido por un alcalde acorralado, incapaz de abordar los retos de la ciudad y superado por el cargo”.
De este modo, Nuria Garrido ha recordado que, mientras el resto de concejales desistieron, el alcalde Velázquez empujó a su portavoz a mantener la querella con el único propósito de intentar desprestigiar a Milagros Tolón, que fue la única que ha dado una solución a la Colección Luis Alba.
Por tanto, queda claro que Velázquez es el cerebro de la política de desprestigio que practica el PP en Toledo, la política de “calumnia que algo queda” y del insulto y la mentira permanentes y que utiliza a su portavoz como colaborador necesario.
A través de esta política, Velázquez oculta su incompetencia y el gran fraude electoral de quienes se presentaron para bajar los impuestos municipales y cuando han tenido la oportunidad de hacerlo, los han subido, ha afirmado Nuria Garrido para insistir en que mintieron cuando decían que no había dinero para festejos ni para cultura, mintieron cuando filtraron que el Primark se había inaugurado sin licencia, o mintieron cuando dijeron que los fondos europeos estaban en riesgo, entre otras muchas cosas.