La Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha concedido al Ayuntamiento de Toledo un proyecto para la recuperación y reducción del riesgo de inundación de la ribera del Tajo en la zona oeste de la ciudad con un importe de 3.025.393,44 euros.
El proyecto planteado por el Ayuntamiento de Toledo ha sido “valorado positivamente por encima de otros que concurrían a la propuesta a través de un comité de evaluación integrado por una presidencia y cuatro vocales” y deberá iniciarse “de forma inmediata” contando para su desarrollo con una fecha límite del 31 de diciembre de 2025.
El objeto de la convocatoria, planteada el pasado mes de septiembre, es la concesión de ayudas para el fomento de actuaciones dirigidas a la restauración de ecosistemas fluviales y a la reducción del riesgo de inundación en entornos urbanos españoles a través de soluciones basadas en la naturaleza y el presupuesto total es de 75 millones, con una cuantía máxima por proyecto de cuatro. El Ayuntamiento concurrió a la ayuda con un proyecto para actuar en la zona de Safont, Huerta del Rey y la desembocadura del Arroyo de la Rosa, con un área de intervención que comprende la zona del cauce en dichos sectores y que tienen más probabilidades de inundación.
En total, se actuará sobre una superficie de 91.040 metros cuadrados a través de tres tipos de actuaciones que el edil de Fondos Europeos ha detallado. De un lado, se trabajará en la ‘Conservación del sistema ripario y del bosque de ribera’, en la zona de Safont y Huerta del Rey a lo largo del cauce del río. Se trata de mejorar un entorno “muy degradado por la erosión del río sobre una orilla desnuda y por los campos de cultivo”. En este punto, se plantean intervenciones, tratamientos y plantaciones que mejoren la cobertura vegetal, la biodiversidad del terreno e intervenciones en el micropaisaje que refuercen la diversidad faunística ya que se trata de “un espacio muy rico en aves, algunas en peligro como limícolas, o pescadoras, además de con una notable riqueza en mamíferos y reptiles”.
En segundo lugar, se plantea la ‘Lucha contra la erosión’ que se desarrollará en el espacio comprendido entre el camino GR-113 y los campos de cultivo para revertir procesos erosivos y, en tercer lugar, ‘Crear una masa arbórea con frondosas’ entre el camino y los campos de cultivo para “recuperar lo que en su día debió ser un bosque frondoso de ribera”.
El proyecto, tal y como ha destacado Rueda, incluye un modelo participativo en el que se integrarán a vecinos y colectivos interesados como ecologistas o la Mesa del Agua y, además, cuenta con la asistencia externa de la Cátedra del Tajo de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
La Fundación Biodiversidad se creó en el año 1998, es parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y tiene como objetivo proteger el patrimonio natural de España a través de fondos españoles y europeos.