El Gobierno regional aprobará una inversión cercana al millón de euros para la adecuación del área de Medicina Nuclear del Hospital Universitario de Toledo
El Ejecutivo regional ha licitado recientemente el equipamiento de alta tecnología con el que estará dotado este servicio. En concreto, dos gammacámaras y un PET-TC, con una inversión que supera los cuatro millones de euros.
El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha aprobará la próxima semana una inversión de 912.375 euros para la contratación de la redacción de proyecto y ejecución de las obras de adecuación de los espacios necesarios para la puesta en marcha del nuevo servicio de Medicina Nuclear del Hospital Universitario de Toledo.
En concreto, las obras a ejecutar irán destinadas a la implantación de dos salas que albergarán sendas gammacámaras y otra donde se instalará un PET-TC. Este equipamiento de alta tecnología ha sido recientemente licitado por el Ejecutivo regional, por un importe superior a los cuatro millones de euros, dentro del Plan INVEAT.
A este equipamiento se unirá en una segunda fase un PET-Resonancia Magnética en un espacio que quedará definido y estructurado en el proyecto arquitectónico que se va a llevar a cabo en estos momentos, completando así las prestaciones de este servicio.
El servicio de Medicina Nuclear es, junto a los de Oncología Radioterápica y Radiofísica y Protección Radiológica, una de las nuevas especialidades que se han sumado a la cartera de prestaciones con la apertura del Hospital Universitario de Toledo.
Este nuevo servicio se ubicará en la primera planta del Edificio E del Hospital Universitario de Toledo y contará con una superficie de 1.500 metros cuadrados. En esta zona se desarrollará la casi totalidad de la actividad de la cartera de servicios de Medicina Nuclear, salvo el área de Terapia Metabólica, que está ubicada en la Planta 3.
Además, dispondrá de dos habitaciones de terapia metabólica para tratamientos oncológicos con isótopos radioactivos, ubicadas en el control de hospitalización de Oncología-Hematología, así como un almacén de residuos radiactivos en el sótano 2.
La Medicina Nuclear es la rama de la Medicina que emplea los isótopos radiactivos, las radiaciones nucleares, las variaciones electromagnéticas de los componentes del núcleo y técnicas biofísicas afines para la prevención, diagnóstico, terapéutica e investigación médica. Sus principales campos de acción son el diagnóstico por imagen y el tratamiento de determinadas enfermedades mediante el uso de medicamentos radiofármacos.
Las aplicaciones clínicas de los radiofármacos abarcan prácticamente a todas las especialidades médicas y sus áreas de aplicación son tanto diagnósticas como terapéuticas.
Las técnicas de diagnóstico se basan en los radiofármacos o trazadores, que son sustancias que, introducidas en el organismo, permiten su seguimiento desde el exterior. El trazador se fija en un tejido, órgano o sistema determinado. Mediante la utilización de una gammacámara se obtienen imágenes de dicho órgano, que no son únicamente morfológicas, sino funcionales y morfo-funcionales. En los últimos años, gracias a la tomografía por emisión de positrones (PET), los estudios han pasado a ser moleculares.
Desde el punto de vista terapéutico, la Medicina Nuclear tiene sus principales aplicaciones en el cáncer de tiroides, el hipertiroidismo y el tratamiento del dolor óseo.
Las Unidades asistenciales de Medicina Nuclear están conformadas al menos por una sala de preparación de radiofármacos, convenientemente preparada para el almacenamiento de productos radiactivos; una sala de administración a los pacientes; salas de exploraciones, donde se encuentran las gammacámaras, tomógrafos, sondas gamma, gammacámara portátil, densitómetro, etc., y el equipo necesario para el procesado de los estudios en las salas de control y/o despachos de procesado y lectura de informes. Los procedimientos terapéuticos se realizan en habitaciones con recogida de residuos radiactivos.