Paralizan los baldeos en la zona próxima a las Casas Colgadas tras el derrumbe de la calle Canónigos
El Ayuntamiento de Cuenca ha informado que paraliza los baldeos en la zona de Obispo Valero y Ronda de Julián Romero tras el derrumbe de parte de la calle Canónigos, el pasado 12 de mayo.
Decisión que se ha consensuado con los servicios de limpieza “por su posible afección a la red de saneamiento, que a su vez afectaría al colector que ha quedado al descubierto con el derrumbe”.
Así lo ha dado a conocer este viernes el Consistorio, tras la reunión telemática de la junta de portavoces que ha mantenido el alcalde, Darío Dolz, con el resto de grupos políticos.
Una cita en la que el primer edil ha dado a conocer los informes emitidos hasta el momento tras el derrumbe, en concreto el del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), el de la dirección facultativa de la obra y de la empresa que estaba ejecutando las obras de mejora en la zona en el momento del siniestro.
No obstante, está pendiente todavía otro informe, encargado en este caso por el Consorcio que gestiona el Real Patronato a una entidad externa para seguir esclareciendo las causas del suceso.
Informe IGME
Según el informe del IGME, lo que se rompió y posteriormente cayó fue “el muro de sillería que sujetaba el relleno antrópico sobre el que se asentaba el camino de acceso (calle Canónigos) al casco urbano de la ciudad de Cuenca".
Así, ha determinado que esa rotura sólo ha afectado a elementos "antrópicos/constructivos utilizados en el muro, relleno del trasdós y en la calle de acceso, incluyendo tuberías y elementos de drenaje”.
Catedral y Casas Colgadas, sin patologías
Eso sí, destaca que “no se han detectado signos de inestabilidad ni afecciones inducidas por la rotura del muro en el macizo rocoso sobre el que se asientan las Casas Colgadas y la Catedral”.
Añade además que el muro presentaba una "patología constructiva", problema "que no se puede encuadrar como un riesgo geológico y sí como riesgo geotécnico en el que este organismo no tiene competencias”.
Asimismo, el informe recomienda que se analicen los daños en el muro y se busque “una solución segura en consonancia con los aspectos patrimoniales y turísticos de esta zona”, así como que se subsane y refuerce la parte del muro que aún sigue en pie.
En este sentido, Dolz ha informado de estas actuaciones que se están ejecutando tras la generación de una rampa para que pueda acceder la maquinaria de forma segura, y que consisten en separar los elementos aprovechables como los del sillar y almacenarlos fuera de la zona de obras, y retirar aquellos elementos que quedan y que aún pueden caer.
Posteriormente, se harán algunas perforaciones con anclaje a la roca para que sea una zona totalmente segura para continuar los trabajos posteriores.
Informe empresa ACRON
Por su parte, los informes de la dirección facultativa y de la empresa ACRON indican, según Dolz, que “el incidente se produce por un cúmulo de circunstancias adversas, sin que se hubieran manifestado evidencias claras e inequívocas del posible colapso”, así como que “lo ocurrido fue completamente inesperado”.