Salud Pública lanza un mensaje de tranquilidad ante el aumento de casos de tos ferina y descarta un brote en Albacete
En la provincia se han declarado 129 casos de tos ferina desde diciembre de 2023
La Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad ha lanzado un mensaje de tranquilidad ante el aumento que se está produciendo de casos de tos ferina. Así lo ha destacado la directora general de Salud Pública, Laura Ruiz, quien ha recordado que pese a que existe una tendencia al alza en los casos tanto a nivel nacional como internacional, la inmunidad comunitaria que se alcanza con la vacunación es muy alta y la mayoría de casos cursan con síntomas leves.
En este sentido, ha insistido en que la tos ferina es una enfermedad que, de forma cíclica, aparece con mayor o menor intensidad, y por ello ha recordado que una de las medidas más efectivas para protegerse es la vacunación y añadió que “en las épocas de mayor incidencia debemos velar, principalmente, por las personas más vulnerables ante la infección que, en este caso, son lactantes no vacunados, inmunodeprimidos o embarazadas”.
Casos en la provincia de Albacete
Al tratarse de una Enfermedad de Declaración Obligatoria (EDO), desde la Dirección General de Salud Pública han confirmado que se han declarado 129 casos de tos ferina en la provincia de Albacete desde diciembre de 2023 y se contabilizan 68 casos más como probables.
Los casos que se han declarado en Albacete corresponden en su mayoría a escolares, aunque no existe ningún brote de gran dimensión en ningún centro de la provincia. Eso sí, desde Salud Pública insisten en que en estas edades, los compañeros de clase de un caso positivo se consideran contactos por lo que, siguiendo el protocolo de vigilancia, se notifica la existencia de un caso y se insta a los padres a comprobar el estado vacunal de sus hijos y vigilar la posible aparición de síntomas compatibles.
La tos ferina es una enfermedad infecciosa causada por una bacteria muy contagiosa por vía respiratoria, la Bordetella pertussis, que supone un grave riesgo para la vida de los lactantes si no están vacunados, de ahí que desde hace unos años se iniciara la vacunación a mujeres embarazadas.
Los síntomas se desarrollan en dos fases. La primera, que suele durar una o dos semanas, puede confundirse fácilmente con un catarro u otras infecciones respiratorias, ya que causa congestión nasal, fiebre baja y tos leve ocasional. A partir de la segunda semana, es cuando pueden aparecer los síntomas más graves, especialmente ataques de tos rápidos, violentos e incontrolables. En las personas vacunadas, esta segunda fase puede no presentar estos síntomas más típicos.
Las autoridades sanitarias insisten en la importancia de la vacunación como estrategia clave para proteger ante este tipo de enfermedades, así como cumplir con las indicaciones proporcionadas desde Salud Pública para los casos y contactos.
Los expertos han comprobado un aumento de los casos de tos ferina tras la pandemia de Covid-19, tanto en España como a nivel internacional que podría estar relacionada con la retirada de las medidas preventivas derivadas de la pandemia aparte de los ciclos propios de incremento de incidencia cada cuatro o cinco años que suele presentar esta enfermedad.