Los cuatro temporeros se han sentado esta mañana en el banquillo de la Audiencia Provincial de Albacete, acusados de motivar el motín que tuvo lugar el pasado 5 de agosto en el recinto ferial de la capital. Todos han negado haber agredido o lanzado objetos a los agentes y han asegurado que solo trataron de hablar con ellos para denunciar las malas condiciones en las que se encontraban, sin comida suficiente y sin separación entre positivos en covid. Así lo ha explicado uno de los procesados a preguntas del Fiscal.
Ignacio Rodríguez, abogado de uno de los acusados, ha señalado que la condena de tres años de prisión, que se sustituiría por la expulsión del país durante ocho años, les parece desproporcionada.
Juicio en el que también han testificado agentes de la policía que presenciaron los hechos. Una de ellas ha identificado a dos de los procesados y ha asegurado que alentaron el levantamiento y que les lanzaron piedras y botellas de agua, llegando a amenazarla de muerte.
El juicio continuará mañana, miércoles 28 de abril, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete.