Las creaciones de Borgoña halladas en el retablo de la Iglesia de Alcaraz estarán expuestas en el Museo de Santa Cruz
Será en Toledo entre el 23 de marzo y el 26 de junio.
La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha confirmado que las creaciones de Juan de Borgoña halladas en la Iglesia de la Santísima Trinidad de Alcaraz (Albacete) serán mostradas en una gran exposición que se celebrará, entre el 23 de marzo y el 26 de junio de este año, en el Museo de Santa Cruz de Toledo.
Así lo ha dado a conocer la consejera en el acto de presentación de este hallazgo, que se ha celebrado en el Museo de Albacete y que ha estado presidido por el jefe del Ejecutivo autonómico, Emiliano García-Page, y por el obispo de Albacete, Ángel Fernández, entre otras personalidades.
Rosa Ana Rodríguez también ha comentado que cuando estas obras vuelvan a su contexto “las podremos ver como una experiencia de conjunto y nos podrán hablar, sin duda, como nos quería hablar Juan de Borgoña, el gran pintor que supo narrarnos su historia a través de la imagen y la pintura”.
En este acto también han estado presentes el alcalde de Albacete, Emilio Sáez; el vicario general de la diócesis, Pedro Jesús Valero; el delegado de la Junta en Albacete, Pedro Antonio Ruiz: la viceconsejera de Cultura y Deportes, Ana Muñoz; y la directora del Museo de Albacete, Rubí Sanz.
La restauración de las obras
La restauración del retablo del siglo XVI de la iglesia de la Santísima Trinidad de Alcaraz sacó a la luz 18 esculturas y ocho excepcionales tablas renacentistas de Juan de Borgoña, que permanecían ocultas bajo unas anodinas pinturas barrocas.
Movidos por la celebración del VIII Centenario de la Aparición de la Virgen de Cortes, patrona de Alcaraz, los trabajos de restauración corrieron a cargo de la empresa ‘El Parteluz’ en sus talleres de Albacete.
En el proceso de restauración, que se extendió desde el mes de octubre de 2021 y hasta principios del mes de marzo de 2022, el equipo dirigido por Pablo Nieto dilucidó que las tablas presentaban huellas evidentes de al menos un incendio que las afectó y que, probablemente, determinó la decisión de cubrirlas con las nuevas escenas en un momento del siglo XVII.
El trabajo realizado en las pinturas consistió en la eliminación de las capas de yeso, utilizando técnicas reversibles y aplicando capas de protección. En cuanto a las esculturas, se optó por primar la limpieza de las policromías actualmente existentes.
Algunas de las conclusiones que se obtuvieron, tras la realización de los trabajos, fueron que las pinturas conservaban de media entre un 70 y un 80 por ciento del original; que eran tableros que aparecían superpuestos uno sobre otro y no clavados a la estructura del retablo; y que no se tuvieron en cuenta los temas abordados por Borgoña a la hora de decidir los nuevos trabajos a introducir en el siglo XVII.