Acaban de llegar a Cantabria dos nuevos examinadores para intentar amortiguar una lista de espera que supera los 2.000 aspirantes en nuestra comunidad. El portavoz del gremio Alberto Santamaría cree que la dotación de este personal supondrá rebajar en el corto plazo medio centenar de alumnos de esta lista. El problema es complicado y la solución no será inmediata según este profesional que se ha pasado por los micrófonos del programa para analizar una situación que perdura en el tiempo en todas las comunidades autónomas.