Illes BAlears |
Este jueves el Parlament balear ha acordado, a propuesta del PSIB-PSOE, renegociar el acuerdo existente con las empresas de cruceros para acceder al Puerto de Palma. En estos momento sigue vigente la limitación de un máximo de tres buques que pueden coincidir el mismo día en la bahía, aunque este límite se ha superado en días puntuales.
Precisamente hoy la patronal de cruceros se ha pronunciado en Onda Cero mientras resurge la polémica en torno al turismo y la saturación que sufre desde hace unas semanas la isla de Mallorca en sus carreteras. De hecho, este miércoles la presidente del Govern balear, Marga Prohens, pronunció un discurso "valiente" para el PP, asegurando que el modelo turístico balear "ha llegado a su límite".
En cuanto el turismo de cruceros, el dato es que Baleares no acaba de recuperar las cifras previas a la pandemia. En el caso concreto de Ibiza y Menorca, estas islas han superado los niveles de turismo de cruceros de antes de la pandemia, pero no ocurre lo mimso con el puerto de Palma. Hoy el director de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros CLIA en España, Alfredo Serrano, ha dado el dato en Onda Cero. Crece sustancialmente el puerto de Eivissa con cerca de 200 escalas previstas y un incremento del 4%, y el puerto de Maó con 90 escalas previstas, un 15% más con respecto al año pasado.
Eso sí, con respecto al 2019, antes de la pandemia, los crecimientos en Ibiza y Menorca superan incluso el 15 y el 40%, respectivamente. No es el caso de Palma, donde el puerto no acaba de recuperarse tras la bajada durante la crisis sanitaria, pero sigue recibiendo a grandes buques. En las últimas semanas han coincidido más de tres cruceros en la bahía de Palma, superando la limitación impuesta hasta el 2025. Algo que también ha valorado Serrano, insistiendo en que "la limitación se mantienen en vigor".
El director de CLIA en España recuerda que la competencia en el Mediterráneo y otros destinos es feroz y que el turismo de cruceros genera riqueza y empleo. Eso sí, las prohibiciones y mensajes anti-turístico, en sus palabras, pueden causar mala imagen del destino, por lo que invita a un debate sereno y serio en la sociedad.