El portavoz del Govern y conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha aclarado este viernes que la administración podrá seguir sancionando a los titulares de alquileres vacacionales que se comercialicen sin estar inscritos en el registro oficial, si bien no se multará a la plataforma en la que se publiquen los anuncios.
Así lo ha indicado después de que este jueves trascendiera que el Tribunal Supremo ha inadmitido el recurso de casación que presentó el Govern contra la anulación de la multa impuesta a Airbnb.
Preguntado por este asunto en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, Negueruela ha reconocido que el resultado del procedimiento judicial no ha sido el que esperaban en el Govern, que trató de impugnar la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, en la que se dio la razón a Airbnb.
La plataforma de alquileres vacacionales había sido sancionada en 2018 con 300.000 euros por publicitar viviendas del alquiler vacacional no inscritas en el registro de la Conselleria de Turismo.
Sin embargo, el TSJIB consideró que Airbnb funciona como "prestador de servicios de la sociedad de información de alojamiento de datos" y que no se le puede exigir que revise de forma exhaustiva y detallada toda la oferta que los anfitriones publican.
Contra la providencia del Tribunal Supremo no cabe recurso, de manera que la anulación es firme y Airbnb no tendrá que pagar la multa.
"Creíamos que nuestra ley era ajustada perfectamente a derecho", ha comentado el conseller, que ha recordado que actualmente hay un proceso abierto en Europa para la regulación del sector del alquiler vacacional. El conseller también ha indicado que se tendrá que estudiar una adaptación de la legislación propia para controlar la comercialización irregular.
Por otra parte, Negueruela ha informado de que las sanciones que se impusieron a HomeAway y TripAdvisor no fueron recurridas y por lo tanto son firmes.