El nuevo equipo de gobierno de Vila ha decidido que de momento no entrarán más de dos cruceros al puerto este año y, que para el siguiente, se estudiará la información recogida durante este verano para tomar una decisión de cara al futuro. Según el alcalde, estos datos parecen ser buenos porque las infraestructuras portuarias están absorbiendo bien la llegada de los turistas y estos grandes buques a la ciudad.
Por otra parte, este agosto se ha incrementado el número de escalas de estos barcos turísticos de un 37%, aunque sin superar el límite dos embarcaciones a la vez en el puerto. Además, Triguero también ha asegurado que se sigue trabajando en que la experiencia de todos los visitantes esté a la altura de sus exigencias y los comerciantes y servicios de la ciudad puedan dar cobertura a su llegada sin problemas.