Medio Ambiente dedicará 5 millones en ayudas hasta 2026 para implantar o mejorar la recogida separada de bioresiduos. Otros 5 se dedicarán a ampliar las instalaciones de reciclado de materia orgánica. Son los anuncios del vicepresidente y consejero de Medio Ambiente del Principado con motivo de la jornada sobre gestión municipal de bioresiduos organizada por Cogersa. Juan Cofiño ha reconocido que Asturias está muy lejos de los objetivos del Ministerio de Transición para que en 2025 se recuperen el 55% de bioresiduos y 65% para 2035. Son metas “ambiciosas” y más exigentes que la normativa europea, enfatiza el Consejero. El plan asturiano de 2024 marca 60.000 toneladas de reciclaje y estamos en 8.000, muy lejos reconoce Cofiño.
El vicepresidente recuerda que es una competencia municipal pero todas las administraciones deben estar implicadas. Además, la recogida separada es obligada para los concejos de más de 5.000 habitantes antes de acabar el año.
El encuentro se ha organizado con el propósito de alentar a los municipios a implantar el modelo de separación y gestión de bioresiduos más adecuado a su realidad y a concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de la correcta separación en los hogares.
Los ponentes han tratado aspectos legislativos y han debatido sobre las metas que se deben alcanzar a corto plazo para conseguir la separación masiva de residuos y la minimización de la bolsa negra, aquella que se destina al contenedor mezcla.
La implantación del quinto contenedor -el marrón- en las localidades más pobladas, el establecimiento de áreas de compostaje comunitario y la generalización del compostaje doméstico en áreas rurales son las vías para evitar que los bioresiduos acaben en el vertedero, opción restringida por ley en la actualidad y que estará prohibida en un futuro próximo.