El primer día de trabajo del Real Oviedo en la semana sembró de dudas la planificación del partido ante el Espanyol. Luis Carrión sabe que tiene la baja segura de Dani Calvo, que vio la quinta en Anduva pero a él se pueden unir varios compañeros en los próximos días.
Paulino de la Fuente y Viti Rozada no pudieron terminar el partido de ayer ante el Mirandés y están pendiente de ser sometidos a pruebas que confirmen o descarten sus lesiones. Santi Cazorla sigue sin poder unirse al trabajo con el resto de compañeros y parece que podría aplazar su vuelta una semana más.
Romario Ibarra sintió unas molestias en el tobillo, después de reaparecer ante el Mirandés de su lesión muscular, y no saltó al terreno de juego con los compañeros, aunque hay confianza en su recuperación para el miércoles, que puede ser clave en caso de perder a Viti y Paulino.
Alemao, que cada vez va contando con más minutos, sí empezó el trabajo con el grupo, pero tuvo que retirarse antes de tiempo al notar cierta carga muscular y los médicos tomaron la decisión para prevenir cualquier contratiempo.
El equipo enfrenta una semana cargada de partidos y entrenamientos ya que al duelo del viernes se une el del próximo martes en Castellón, para buscar la tercera ronda de la Copa, por lo que no habrá días libres hasta disputar ese encuentro.