En su homilía durante la misa de la Basílica de Covadonga, el arzobispo de Oviedo ha alertado sobre los que entienden que en la política hay enemigos, no meros adversarios. Es una deriva "violenta y totalitaria" que afecta a medios de comunicación y jueces en "lugares no lejanos".
Jesús Sanz Montes afirmó que el púlpito "no es para hacer política". A renglón seguido, criticó, por un lado, las leyes que "matan abaratando el aborto de los no nacidos y desprotegiendo a las mujeres más jóvenes" y, por otro, "la eutanasia como derecho al homicidio encubierto de ancianos y enfermos en fase terminal" en vez de apostar por los cuidados paliativos. Además, el responsable de la diócesis asturiana alertó de los que se aprovechan de la crispación en tiempos de crisis social y económica. "Quieren pescar" en ese contexto. Eso sí, dirigiéndose a las autoridades políticas presentes, elogió su "esfuerzo por construir una Asturias unida".