No hay un único motivo. José Luis Acuña señala tres principales. Factores climáticos, falta de control por parte de depredadores y zonas donde las medusas encuentran alimento.
Es imposible predecir si lo sucedido este verano y el anterior, con una presencia anómala de medusas en cantidad y frecuencia, volverá a repetirse. Pero el cambio climático parece que está detrás de esta situación. El mar cantábrico se está "tropicalizando", y eso causa importantes cambios en el ecosistema.
Este experto, que participa en una investigación que tratará de conocer un poco más acerca de las carabelas portuguesas (que no son medusas), recuerda que ante la presencia de medusas es mejor no bañarse, y explica que en otros países y con otros ejemplares las medusas son aprovechadas para, entre otras cosas, la gastronomía.
Aunque la recomendación es apartarse, hay personas como Orlando Fernández Miranda, que no se resistieron a ir al encuentro de estas medusas "gigantes" que vimos en la playa de San Lorenzo. Con una cámara especial, este fotógrafo captó algunas de las imágenes más espectaculares de la presencia de estos organismos. Nos ha explicado cómo consiguió estas imágenes y ha pedido a todos que respetemos la vida de estos animales, que le han dejado algún que otro picor.