Alba lanza las flechas a 60 metros. Hasta 70 ha llegado a tirar. Es un deporte muy metódico que exige buena preparación física y mental. Sobre todo mental. El objetivo es tirar las flechas lo más igual posible, para lo cual hace falta mucha precisión técnica, que es algo que se entrena mucho. Y Alba lo hace pese a que, llama la atención, reconoce no ver demasiado bien de lejos. Fatal de hecho. Se ayuda de un catalejo para ver sus puntuaciones, aunque prefiere saber poco mientras está tirando para estar concentrada.
Ese momento en el que vas a soltar la flecha es el más intenso. No siempre se sabe si es un buen tiro o no, pero lo importante es mantener la calma. Si no es este tiro será el siguiente, apunta Alba.
Aunque no se sepa al no ser un deporte de masas, Asturias tiene buen nivel. Y es un deporte que merece la pena probar (mejor al aire libre que en casa), nos dice, que además de no tiene edad. Poco a poco se nota que más gente se interesa por este deporte. Y ciertas competiciones son muy divertidas de ver. Hay buen rollo.
Alba combina el tiro con arco con su otra pasión. La ópera. Es regidora en una compañía, y ve su futuro más ligada con ese mundo que con el tiro con arco. Lo seguirá practicando como hobby, pero no es algo de lo que se pueda vivir. Ahora lo compagina con los estudios, y le ayuda a mejorar su concentración.