Un barrio que pierde a sus vecinos es un barrio que se pierde, y en Cimavilla temen que se llegue a un punto de difícil retorno. No están en contra de los pisos turísticos, pero sí en contra de su proliferación. Edificios enteros se dedican a esta modalidad de alojamiento, y no son pocos los ilegales, los "piratas". Encontrar una vivienda de alquiler en el barrio para todo el año es misión imposible, y muchos acaban por marcharse por los obstáculos que se encuentran para seguir allí.
Sergio Álvarez, presidente de la AAVV, lamenta que todo esto pase sin que se haga nada. De hecho, añade, el Ayuntamiento parece mirarles solo como un espacio turístico y todo lo que se hace en el barrio está pensado para quienes nos visitan y no para los que viven aquí. Aboga por repensar el modelo, y no precisamente el festivo, porque entiende que ampliar la Semana Grande no es la prioridad.