Las carteras rurales, Premio Mujer Rural 2023

El Consejo Municipal de la Mujer ha decidido que el galardón ‘Mujer Rural 2023’ de Cangas del Narcea ponga en valor el trabajo de las carteras rurales. “Son una pieza clave en la vida de los pueblos. Su trabajo va más allá de entregar las cartas al destinatario. Dedican su tiempo a estos vecinos y les ayudan con las medicinas, con trámites, con recados… Cumplen, en definitiva, una importante labor social”, destacó la edil de Igualdad, Alba García, que recordó que “son mujeres que viven y trabajan aquí, por lo tanto, están contribuyendo a fijar población”.

En la actualidad, son ocho las mujeres que prestan este servicio en el municipio, distribuidas en diferentes zonas, como son: Besullo, Rengos, Sierra, Corias, Genestoso y Leitariegos. El día a día de estas mujeres conlleva transitar por las difíciles carreteras del municipio, y, muchas de ellas, pelean cada invierno con las inclemencias del tiempo, pues su zona de trabajo se sitúa en cotas altas. Pese a estas adversidades, jornada a jornada, las carteras rurales se han ido ganando el afecto de los vecinos. Así, a lo largo de su trayectoria profesional, han sido muchas las anécdotas que han vivido: desde celebrar la pensión con un jubilado al entregarle la notificación hasta asistir partos de animales llegando incluso arrimar el hombro para ayudar al vecino en apuros.

La presencia de la mujer en Correos se remonta al siglo XVII y durante casi un siglo el servicio lo prestaron solo carteras. En torno a 1830, ya había mujeres administradoras de estafetas agregadas consideradas empleadas de la Renta y otras, llamadas conductoras de travesía, que se encargaban de llevar la correspondencia en diligencia, a caballo o a pie. Cabe recordar que Correos fue la primera compañía estatal española en incluir mujeres en su plantilla: en 1881 se incorporó la primera mujer telegrafista y dos años más tarde, las mujeres fueron reconocidas oficialmente como trabajadoras. En 1909 se convocaron por primera vez oposiciones a Telégrafos para Auxiliares femeninas y en 1922 se nombraron las primeras 300 auxiliares postales para realizar el trabajo de los jefes y oficiales de Correos, que se habían declarado en huelga. Sin embargo, hubo que esperar a 1979 para hacer posible el acceso masivo de las mujeres por oposición y en igualdad de condiciones.