El Control Biológico utiliza insectos como la mariquita para ser liberados de forma controlada y contribuir a un restablecimiento del equilibrio natural en zonas arboladas afectadas por plagas. La principal ventaja es que es la propia naturaleza la que pone orden en estos espacios sin necesidad de recurrir a productos químicos.
La consejera de Medio Ambiente, Tatiana Gaudes, ha señalado que estos 145.000 insectos son aliados idóneos para la conservación y el equilibrio de la biodiversidad de Zaragoza y la renaturalización de espacios naturales en la Ciudad. Las especies utilizadas son Adalia bipunctata o mariquita, Aphidius colemani, una pequeña avispa que se alimenta de pulgón, Anthocoris, depredador de la psila del peral, Chrysoperlas, un neuróptero que acaba con la mosca blanca, y Cryptolaemus montrouzieri, para combatir la cochinilla.
Durante los próximos días, los operarios de las contratas dedicadas al cuidado de los espacios naturales de la ciudad, liberarán a estos insectos en los árboles, arbustos o plantas objeto de tratamiento. Después, se realizará un seguimiento de sus poblaciones para determinar la evolución de estos insectos y comprobar su capacidad de establecerse y formar parte del ecosistema urbano.