Tanto los agentes sociales como el presidente coinciden en que Aragón apenas tiene capacidad para influir en una crisis que afecta a toda Europa. Sin embargo, todos han querido trasladar un mensaje de tranquilidad a la sociedad, asegurando que la situación dista de ser catastrófica y que seguirán trabajando para adaptarse a la coyuntura. Lambán, además, se ha ofrecido para ser el interlocutor ante el Gobierno de España, en todas las reivindicaciones que sean necesarias.
Los sindicatos recuerdan que, en momentos de crisis, siempre se acentúan las desigualdades. Por eso piden al Gobierno que esté atento para proteger a los más vulnerables con medidas que complementen a las de Pedro Sánchez. El secretario general de UGT, Daniel Alastuey, ve necesario un pacto salarial, que podría ser el primer paso hacia un pacto de rentas, y el líder de Comisiones Obreras, Manuel Pina, insiste en la necesidad de mantener el sosiego.
Por su parte, los empresarios reconocen que esta crisis no está afectando por igual a todos los sectores ni a todas las compañías, y confían en que serán capaces de superar la situación tan compleja que se avecina. El presidente de CEOE Aragón, Miguel Marzo, reclama una mejor gestión de los fondos europeos y la responsable de Cepyme, María Jesús Lorente, advierte de que la subida de los tipos de interés puede frenar aún más a las pymes.