Cuando se habla de hipotecas se suele unir diferentes productos bancarios como los seguros. En Economía a Pie de Calle, Luis Ignacio Fernández Irigoyen, explica que lo importante es tener las ideas claras porque, una cosa es que los seguros sean necesarios y otra muy diferente es que el coste de esos seguros arruine la hipoteca y que ese buen tipo de interés inicial ofrecido acabe siendo inútil.
Irigoyen cuenta que, habitualmente, los seguros que suelen asociarse a una hipoteca son el de hogar (que es necesario por obligación legal, lo contrates con quien lo contrates), el de vida (si queremos, si pasa algo, no dejar deudas a los herederos) y el de impagos por desempleo (si te quedas en el paro, poder pagar las cuotas mensuales).
En estos casos, Irigoyen ofrece algunos consejos para que las coberturas contratadas, estén ajustadas al valor del piso: