Las ocupaciones más demandadas fueron las de teleoperadores y operarios industriales. Sin embargo, estos perfiles varían según la provincia. En Huesca se demandaron sobre todo camareros, en Zaragozateleoperadores y en Teruel peones de la construcción, sobre todo debido al desmantelamiento de la central térmica de Andorra.
Desde CEPYME recuerdan que el 40% de las contrataciones se cubrieron con personal sin la formación demandada y lamentan las dificultades que tienen las pequeñas empresas para conseguir trabajadores. Y es que, según el presiente de CEPYME-Huesca, Fernando Luna, la subida del salario mínimo y las ayudas sociales, hacen que algunos demandantes de empleo rechacen las ofertas.
Otro problema que denuncian desde esta organización es que muchas veces, la formación impartida en las universidades o en los centros de FP no se corresponden con la realidad. Por eso, la presidenta de CEPYME-Aragón, María Jesús Lorente, ha pedido una mayor coordinación a la hora de elaborar los planes de estudio.
Debido a la falta de mano de obra cualificada, el Ministerio de Trabajo va a poner en marcha una experiencia piloto en la provincia de Huesca para traer trabajadores desde Perú para el sector del metal. De momento, ya se han recibido más de 70 solicitudes por parte de empresas oscenses que no encuentran personal.