Zaragoza | 28.04.2023 09:51
Desde que naciera la muñeca Barbie en marzo de 1959, son muchas las personas que han tenido alguna, o varias, de las diferentes versiones que se han ido sacando a la venta. La última de ellas es una Barbie con Síndrome de Down, en la colección de “Barbie Fashionistas”. Esta muñeca está vestida con un vestido con mariposas y colores azul y amarillo, símbolos que se asocian a la conciencia con del síndrome de down. Y un detalle más, un colgante rosa que representa las tres copias del cromosoma 21.
Para Isabel Gil Pascual, coordinadora del Centro de Atención post temprana de la Fundación Down Zaragoza, muñecas como esta suponen un refuerzo positivo porque ayuda a visualizar y normalizar que vivimos en una sociedad diversa y los niños pueden llegar a identificar y tratar con normalidad que haya personas diferentes en todos los aspectos.
Gil Pascual cuenta que desde la infancia no se tiene esa percepción de la diferencia y la sociedad cuenta cada vez con más diversidad, por lo que mostrarla es positivo. Además, los juguetes son para los niños una herramienta en la que los niños se proyectan. De ahí que también tuviera importancia los anteriores modelos de muñecas Barbie con pierna ortopédica o en silla de ruedas.